Benedicto XVI se prepara para la muerte

El Papa emérito Benedicto XVI, de 90 años, agradeció la preocupación de los fieles por su estado de salud en «este último tramo del camino», en una breve carta que publica hoy el diario italiano «Corriere della Sera».

El domingo se cumplen cinco años de la histórica renuncia de Benedicto XVI al papado. Y justo ahora, después de semanas de rumores sobre su estado salud, ha sido él mismo el que ha confesado que se está preparando para la muerte. El Papa emérito ha roto su silencio a través de una carta dirigida al director de «Il Corriere della Sera» en la que agradece las muestras de cariño de los lectores y la preocupación por su estado de salud. «Me ha conmovido que tantos lectores de su periódico deseen saber cómo estoy transcurriendo este último periodo de mi vida. Sólo puedo decir al respecto que, en la lenta disminución de mis fuerzas físicas, interiormente estoy en peregrinación hacia Casa», escribe en una misiva de apenas nueve líneas y que fue enviada como «urgente».

Ratzinger reconoce que «es una gran gracia para mí estar rodeado, en esta última parte de camino a veces un poco fatigoso, de un amor y una bondad tales que no habría podido imaginar. En este sentido, considero necesaria también la pregunta de sus lectores como acompañamiento. Por eso no puedo hacer otra cosa que darles las gracias y asegurarles mi oración». A continuación, envía «cordiales saludos» y firma como «Benedicto XVI».

El director del rotativo, Massimo Franco, afirmó que la carta «parecía que había llegado de otro mundo, más lejano que de los pocos kilómetros que nos separaban». Y es que era la respuesta a las preguntas de los lectores sobre si son ciertos los rumores de los últimos meses sobre el empeoramiento de su estado de salud.

La carta fue entregada directamente a la redacción del periódico desde el Monasterio Mater Ecclesiae, donde fijó su residencia tras su renuncia el 11 de febrero de 2013. La pasada Pascua el Pontífice alemán cumplió 90 años. Aquél día celebró su cumpleaños en la intimidad y recibió la felicitación del Papa Francisco. Sin embargo, en los últimos meses no se le ha podido ver en ningún acto público. Tan sólo en algunas imágenes que han sido compartidas en las redes sociales por personas que lo han podido visitar. Benedicto XVI ya sólo recibe a personas muy cercanas a él o de cierta relevancia.

El Papa emérito ya se expresó sobre la muerte en «Últimas conversaciones», publicado en 2016. En cierto sentido, aseguraba que tenía miedo a la muerte y que, aunque tiene toda la confianza en el Dios amoroso, «mientras uno se acerque más a su rostro, más intensamente sentirá cuánto hizo mal». En ese sentido, el Papa emérito aseguró que le pesa no haber «hecho lo suficiente por la gente». También explicó qué es lo que le dirá a Dios cuando esté frente a Él: «Le rogaré que muestre indulgencia hacia mi miseria». Por el momento, Benedicto XVI continúa en el interior de los muros vaticanos, rezando por la Iglesia y la humanidad.