Desea

Seguimos de resaca emocional por lo vivido hace tres días: ¡muchísimas felicidades a este periódico! LA RAZÓN, por el éxito rotundo en su 25 aniversario.

Fue impresionante estar con tantos amigos, conocidos, personas relevantes de tantos ámbitos, unidos en una gran celebración que tampoco quisieron perderse SSMM los Reyes de España. Fue maravilloso ver personalidades de tantos sectores y tan diversa índole, celebrar el éxito de un largo camino, no exento de curvas y peligros, pero también repleto de esperanza. Fue un auténtico placer compartir, en mayúsculas, y es que celebrar y compartir se ha vuelto prioritario y esencial, especialmente tras la superada pandemia.

Y seguimos de celebración porque hoy se estrena la última película de Disney: “Wish, el poder de los deseos”, de cuya proyección sales, literalmente, ¡de subidón! queriendo comerte el mundo y cumplir todos los sueños. Algo que, por cierto, ¡cuánta falta nos hace! ¡Desea! Porque se cumple. Pero no pongas tus sueños en los bolsillos de nadie. Esto es algo que la película deja claro. La responsabilidad de cumplirlos es solamente nuestra.

¡A cuántas personas nos ha inspirado esta famosa factoría! En mi adolescencia me sirvió mucho ver que la sirenita era tan bella con piernas como sin ellas. Mi tercer hijo se llama Eric por su príncipe. Y si preguntamos por ahí, saldrán infinitas anécdotas como ésta. Todos atesoramos momentos sellados con mensajes e imágenes Disney.

Que la valentía y la resiliencia sigan siendo nuestra fuente de inspiración. Que no nos amilanemos ante la maldad. Me encanta que Disney, en una película que verán millones de personas, desenmascare al narcisista. Cuánto daño hacen estas personas y qué necesario es quitarles la careta. Como se deduce de la película, si hay algo que alabar, es un gran corazón.

Imposible no hacer un paralelismo con esos presidentes de grandes países que anteponen sus deseos de poder y mando al bienestar común y a los sueños de su pueblo.