Sin Perdón
Ábalos, el apestado del PSOE
La sordidez de la trama organizada en medio de la pandemia no levanta voces airadas, porque se dedican a justificar que era un caso aislado que afecta a Ábalos y sus compinches
Ábalos se ha convertido en un apestado. Era el aliado y colaborador más importante de Sánchez. Lo más llamativo es la reacción de la izquierda política y mediática. Nada que ver con la campaña inmisericorde que hizo contra Rajoy y el PP. No veo que Sánchez se aplique a sí mismo aquello que exigía para el entonces presidente del Gobierno por un escándalo que no le afectaba directamente. En este caso estamos hablando del que fue su secretario de Organización y ministro de Transportes. La trama se lucró, además, durante la pandemia. No quiero imaginar que dirían el millonario José Miguel Contreras, tan duro entonces, y sus terminales mediáticas si el escándalo Ábalos afectara a Feijóo. Tendríamos programas monográficos en radio y televisión pidiendo su dimisión. El diario que controla Contreras haría portada tras portada en su contra como hizo contra Paco Camps que era inocente. A esto hay que unir los problemas judiciales de Sánchez y su mujer.
¿Qué sucedería si se tratara de la esposa de Rajoy o Feijóo? La respuesta es evidente y confirma el sectarismo de la armada mediática de Contreras, así como de RTVE que es el canal temático del sanchismo que pagamos todos. La degradación de nuestra democracia y los ataques al Estado de Derecho se pueden constatar con lo que estamos viviendo con la corrupción sistémica del PSOE, los problemas judiciales de la familia presidencial y la reacción de la izquierda política y mediática. La petición de imputación del antiguo hombre fuerte del socialismo no merece ninguna dimisión. Ni siquiera una petición. La sordidez de la trama organizada en medio de la pandemia no levanta voces airadas, porque se dedican a justificar que era un caso aislado que afecta a Ábalos y sus compinches. No importa la colaboración de los dirigentes socialistas que mantiene Sánchez. Es irrelevante lo que hemos sabido de «cariño» Armengol. Son socialistas y por tanto cuentan con la protección de los poderosos medios de la izquierda. Al PNV no le importa chapotear en este cenagal y hacer justo lo contrario de lo que exigió a Rajoy. Sumar mira hacia otro lado mientras Díaz, Errejón y Urtasun intentan encapsular el escándalo en Ábalos. Nada que ver todos ellos con lo que hacían o decían contra Rajoy que no tenía ninguna responsabilidad en la Gürtel.
Francisco Marhuendaes catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE).