Energías renovables
2023: un año de crecimiento y contradicciones en renovables
Según el Renewables Global Status Report 2024, el año pasado el sector de las energías renovables alcanzó una expansión sin precedentes, con un aumento del 36% en la capacidad instalada que sumó 473 gigavatios, impulsado principalmente por la energía solar
En 2023, el mundo alcanzó un nuevo récord de 473 gigavatios instalados, lo que representa un aumento del 36% respecto al año anterior. Según revela el Renewables Global Status Report 2024, este avance, al que sitúa en un contexto de crecientes inversiones y compromisos internacionales por promover la transición ecológica, fue impulsado mayoritariamente por la energía solar. No obstante, no se trata un hito exento de desafíos.
La solar, energía clave
El principal motor detrás del aumento en la capacidad de energías renovables fue la energía solar fotovoltaica, que se vio reforzada en varios países como China, que añadió en un solo año una cantidad de capacidad solar equivalente a la suma global de 2022. Además, la capacidad total instalada de energía solar en Estados Unidos creció más de un 50% hasta alcanzar casi 33 GW. En otras tecnologías, sin embargo, el panorama no fue tan halagüeño. Es el caso de la eólica, que también en EEUU cayó a su nivel más bajo desde 2014, lo que evidencia un claro parón en el desarrollo de esta fuente de energía.
En la Unión Europea (UE), la energía solar también experimentó un reseñable crecimiento: de 41 GW en 2022 a 56 GW en 2023. La eólica, sin embargo, se mantuvo estable con un ligero aumento que alcanzó los 17 GW.
A nivel global, por tanto, las cifras subrayan el papel preponderante de la energía solar en la transición energética global, así como las dificultades de otras tecnologías, como el caso de la eólica, por mantenerse o seguir creciendo.
El papel de China
En 2023, China mantuvo su dominio en el sector de las energías renovables. A finales de año, el país operaba alrededor de 30 GW de energía eólica marina, lo que representaba aproximadamente la mitad de la capacidad global en este tipo de energía. En la otra cara de la moneda, este informe señala que también hubo un fuerte aumento de los combustibles fósiles en este mismo país. De hecho, a lo largo de 2023, se aprobó la construcción de 114 GW de nuevas plantas de carbón, un aumento del 10% respecto al año anterior.
Esta contradicción refleja los desafíos que enfrenta China para equilibrar su enorme demanda energética con sus compromisos de sostenibilidad.
Avances políticos y económicos en la transición energética
El avance de las energías renovables en 2023 no fue solo una cuestión de tecnología. En la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), celebrada en Dubái, 130 países se comprometieron a triplicar la capacidad de energía renovable y a duplicar la tasa anual de mejoras en eficiencia energética para 2030.
En paralelo, las políticas industriales y comerciales de algunos países clave jugaron un rol importante en el desarrollo del sector. En Estados Unidos, una ley para reducir la inflación impulsó más de 250 proyectos de manufactura de energía limpia, mientras que la Unión Europea propuso alcanzar las emisiones netas en industria y lanzó la primera fase del
el Acta de Industria de Cero Emisiones Netas y lanzó la primera fase del Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (MAFC), un instrumento para fijar "un precio justo del carbono emitido durante la producción de mercancías intensivas en carbono que entran en la UE y fomentar una producción industrial más limpia en países no pertenecientes a la UE". Estas políticas buscan no solo acelerar la adopción de energías limpias, sino también reducir la dependencia de componentes críticos provenientes de otros países.
Inversión en renovables
A pesar de las diferentes problemáticas, la inversión global en energías renovables creció un 8% en 2023, alcanzando los 622.500 millones de dólares, frente a los 576.000 millones en 2022. Este récord subraya el interés creciente en el sector, aunque también destaca las tensiones derivadas de la situación económica global. Aunque los precios de los combustibles fósiles como el gas y el carbón disminuyeron en la primera mitad del año, las presiones económicas persistieron.
Además, la geopolítica jugó un papel crucial en la evolución del sector energético en 2023. Los conflictos en Europa y Oriente Medio interrumpieron las cadenas de suministro y el transporte internacional, lo que tuvo un gran impacto en los mercados energéticos.
El año también estuvo marcado por fenómenos climáticos extremos, como olas de calor y temperaturas muy elevadas, lo que señala la urgencia de acelerar la transición hacia una energía más limpia y sostenible.