Con la llegada del otoño, las hojas de los árboles se vuelven marrones y las estampas que dejan son preciosas. Por eso, quien quiera escapar del centro al menos un día y visitar entornos relajantes para olvidar del estrés diario, existen numerosos pueblos a pocos kilómetros de la capital.

Tanto dentro de la propia Comunidad de Madrid, así como en las fronteras con Guadalajara hay multitud de localidades que son un verdadero fondo de postal para los amantes del turismo rural en otoño. Desde pequeñas villas con un pasado histórico hasta pueblos casi sin habitantes repletos de naturaleza. Todos están muy cerca de Madrid y merecen mucho la pena visitarlos.

Hoyo de Manzanares

Dentro de la Sierra de Guadarrama, se encuentra este pueblo madrileño en el que la naturaleza muestra un gran papel. Entre las construcciones de piedra, se encuentra su famosa Ruta de las Casas de Piedra, perfecta para pasear rodeado de edificios increíbles. Además muy cerca de la localidad, se ubica el yacimiento arqueológico de La Cabilda, una aldea conservaba de hace catorce siglos.

Madarcos

Considerado el pueblo más pequeño de la Comunidad de Madrid, es una buena opción para pasar unos días fuera del centro urbano. Se encuentra situado en Somosierra, y es tan pequeño que no llega ni a ocho kilómetros cuadrados. Rodeado de naturaleza, es un lugar precioso para enmarcar paisajes otoñales y visitar edificios históricos como la Iglesia de Santa Ana, del siglo XVII. Además, hay diversas rutas de senderismo que atraviesan el municipio.

Puebla de la Sierra

Un pueblo de menos de 100 habitantes ubicado en la Sierra del Rincón, está tan aislado que es perfecto para desconectar. Sin embargo, no se encuentra muy lejos del centro, a una hora y media. Con calles empedradas, Puebla de la Sierra contiene un entorno natural de pinos y robles de más de 600 años, convirtiéndose en una opción perfecta para una escapada de un día.

San Lorenzo de El Escorial

Esta opción más conocida, está rodeada de historia de España y de paisajes encantadores. En él se encuentra el Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, una de las obras arquitectónicas más famosas del país. Este municipio, localizado en la Sierra de Guadarrama, incluye otros monumentos como las Casitas renacentistas del Príncipe y del Infante, así como la Silla de Felipe II.

Pedraza

Este último pueblo queda fuera de la Comunidad de Madrid, pero siempre es una buena opción cruzar la frontera. Ubicado en la provincia de Segovia, con una hora y media de trayecto, esta localidad medieval contiene una muralla que la rodea en su totalidad, por lo que para entrar se debe atravesar la famosa Puerta de la Villa. También con calles empedradas, Pedraza muestra una arquitectura medieval, así como un castillo del siglo XII.