Temporal
Madrid “se rearma” en su Plan de Nevadas a la espera de otra “Filomena”
La Delegación del Gobierno ha almacenado casi 26.400 toneladas de sal (casi 5.000 más que el año anterior), y 2.099.000 litros de salmuera, además de 207 máquinas quitanieves
Han bajado las temperaturas en la Comunidad de Madrid. Y se ha disparado el temor a que en la región se puedan repetir las imágenes de caos y aislamiento que se padecieron durante la gran nevada de “Filomena”. De ahí que hoy se presentase el Plan Nevadas 2021-2022 preparado por la Delegación del Gobierno en Madrid para las carreteras de ámbito estatal en esta temporada invernal cuenta con un total de 207 máquinas quitanieves (192 en la pasada temporada) ubicadas en 15 municipios, 12 de la región, entre ellos la capital, y de casi 26.400 toneladas de sal (casi 5.000 más que el año anterior), y 2.099.000 litros de salmuera (agua con sal).
La delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, ha presentado este viernes el Plan, con el que se pretende asegurar la vialidad en la Red de Carreteras del Estado en la región y reducir al mínimo el número de tramos con restricciones al tráfico o retenciones y su duración “mediante la adecuada coordinación”.
El Plan responderá a los fenómenos adversos claramente invernales (nevadas, hielo, granizo o lluvia) que se produzcan en las vías de ámbito estatal de la Comunidad de Madrid entre el 1 de noviembre y el 31 de marzo.
En la presentación del Plan de Nevadas para esta temporada, González ha tildado de “mala” la campaña invernal del curso pasado debido a la incidencia de la borrasca Filomena, que afectó de lleno a nuestro territorio, “alterando de forma sustancial la vida de nuestra comunidad”, aunque precisa que fue una nevada excepcional que fue seguida de unas bajas temperaturas que agravaron la situación.
La delegada también ha remarcado que fenómenos como este “ponen de manifiesto la necesidad de mejorar la coordinación entre administraciones y la información efectiva a los ciudadanos sobre riesgos y recomendaciones”.
Previamente a este acto, la delegada presidió en la sede de la Delegación del Gobierno la reunión de coordinación de actuaciones ante situaciones de nevadas en la que participaron representantes de los diferentes organismos competentes.
Asistió el jefe de la Comandancia de Madrid de la Guardia Civil, coronel David Blanes; la jefa de la Demarcación de Carreteras del Estado, Gloria Ramos; el jefe provincial de Tráfico de Madrid, Cristóbal Cremades; el jefe del Primer Batallón de la UME, teniente coronel Alberto Modino; el director de la Agencia de Seguridad y Emergencias 112 de la Comunidad, Carlos Novillo; y el responsable de Protección Civil de la Delegación del Gobierno, Miguel Ángel Jiménez, además de representantes de AENA, AEMET y de las Direcciones Generales de Protección Civil del Ministerio del Interior y del Ayuntamiento de Madrid.
Despliegue de recursos
Además de las máquinas, toneladas de sal y litros de salmuera disponibles, hay previstas 29.772 plazas para aparcamiento obligatorio de camiones en las áreas de estacionamiento y 89 puntos de control para el establecimiento de restricciones a la circulación en la Comunidad.
También se activarán, cuando sean necesarios, los aspersores automáticos de fundentes de nieve situados en un tramo de un kilómetro en la entrada del Bus-VAO en Las Rozas (A-6) para evitar accidentes y retenciones en una zona especialmente sensible, donde las máquinas quitanieves tienen un acceso complicado.
A todos estos recursos, hay que sumar los casi 700 agentes de la Agrupación de la Guardia Civil de Tráfico de Madrid y 400 vehículos preparados para actuar en cualquier momento. Con todo ello se pretende evitar problemas de circulación en los casi 900 kilómetros de red viaria del Estado que discurren la región.
González ha recordado también el refuerzo que supone el despliegue de la UME cuando los servicios ordinarios se ven desbordados por una situación extrema, colaborando en todo momento con ellos.
Accesos a Madrid
El Plan contempla como principales puntos conflictivos las cotas superiores a 1.000 metros, que son: el Puerto de Somosierra en la A-1 (con 1.444 metros de altitud, desde el kilómetro 84 al 96), y el Alto del León en la Nacional VI (con 1.511 metros de altitud, desde el kilómetro 52 a 57).
También, los tramos de autopista A-6, del kilómetro 42 al límite de la provincia, y de la autovía A-1, desde el kilómetro 57 hasta el límite con la provincia de Segovia.
Otras de las prioridades de la Delegación del Gobierno, dada la importancia estratégica de la capital, es garantizar la vialidad de sus accesos. Así, prestarán especial atención a las vías que se pueden calificar como ‘críticas’, como son los anillos viales de circunvalación, las radiales de entrada/salida a Madrid y los accesos al aeropuerto de Barajas, las estaciones de ferrocarril y otras infraestructuras de transportes.
Distintas fases
El Plan establece los procedimientos operativos que deberán llevarse a cabo según las tres posibles fases que pueden producirse: Alerta, Preemergencia y Emergencia. En cada fase se concretan los motivos para su declaración, quiénes deben intervenir y qué recursos deben ponerse en marcha.
La declaración de las tres fases está relacionada directamente con los niveles de riesgo que puede emitir la AEMET a través del Plan Nacional de Predicción y Vigilancia de Meteorología Adversa (METEOALERTA). El Verde significa que no existe ningún riesgo meteorológico. En Amarillo no existe riesgo meteorológico para la población en general aunque sí para alguna actividad concreta; el Naranja cuando el riesgo meteorológico es importante; y el Rojo cuando el riesgo es considerado extremo.
Según las previsiones meteorológicas, el Plan prevé la declaración de tres fases. La de Alerta se iniciará con la emisión por el Centro Nacional de Predicción de AEMET de un boletín de aviso de nevadas de niveles rojo o naranja relativo a un determinado ámbito territorial, o un boletín de situación amarilla por nevadas en el Área Metropolitana y Henares. Supondrá la inmediata puesta en funcionamiento del Centro de Coordinación Operativa de la Delegación.
La Fase Preemergencia se producirá cuando comience a nevar y la previsión de nevada sea fuerte y se deban tomar decisiones sobre la conveniencia del despliegue de máquinas quitanieves y esparcidoras de sal en la calzada para la retirada de nieve, así como decisiones de corte de tráfico de camiones y autobuses.
Además, en esta misma fase, se establecerán restricciones a las condiciones normales de circulación, que pueden suponer el uso obligado de cadenas para transitar por la red de carreteras, así como la puesta en marcha de controles por parte de la Guardia Civil de Tráfico.
En este caso, se establecerán procedimientos operativos de prevención como la movilización de grúas para retirar vehículos inmovilizados que dificulten las actuaciones o la movilización de máquinas quitanieves para dejar expeditas las vías.
La Fase de Emergencia se alcanzará desde el mismo momento en que la nieve existente en la calzada, el hielo o cualquier otra circunstancia (como vehículos atravesados) provoquen el corte de la calzada y fuera necesario prestar atención a personas que puedan haberse quedado bloqueados y les resulte imposible seguir el viaje por sus propios medios.
En este caso, además de las actuaciones previstas en las dos fases anteriores, se pondrá a disposición del órgano competente en materia de Protección Civil de la Comunidad los medios de la Administración General del Estado que puedan contribuir a una adecuada atención a los ocupantes de vehículos que hayan quedado bloqueados.