Balenciaga continúa navegando en la polémica con sus pendientes de cordones

Parece que la controversia se ha convertido en la mejor aliada de Balenciaga para conseguir visibilizar sus nuevos productos. No sabemos si es una nueva forma de hacer marketing o que las excentricidades de la marca todavía no son correctamente comprendidas por el público en general. Lo que sí aseguramos es que la firma de lujo ha vuelto a poner patas arriba las redessociales con su última propuesta de joyería.

Los productos ideados por Demna Gvasalia, director creativo de la firma, nunca dejan indiferente al público, que se divide entre los que consideran estas innovadoras creaciones una genialidad o los que tachan a la compañía de aprovechar el reconocimiento de la firma para encarecer productos cotidianos.

Sin embargo, a pesar de polémicas tan sonadas como las crocs con tacón, las maxibolsas de cuadros (que recordaban a las clásicas bolsas de rafia que utilizamos para hacer la compra) o las zapatillas full destroyed, sus diseños se agotan y, en la mayoría de los casos, en tiempo récord.

¿Su último boom? Una colección de joyas basada en poliéster reciclado, algodón y latón envejecido. Dicho así no suena tan rompedor, de hecho, parece incluso un paso meditado de la compañía hacia la joyería sostenible, pero ¿y si matizamos que se trata de una propuesta basada en cordones de zapatos especialmente caros?

Así es la nueva propuesta de Balenciaga

La revalorización de los objetos más cotidianos sigue siendo el centro de la colección. Los cordones de zapatos se vuelven los protagonistas de una de las líneas más disruptivas de esta temporada, con pendientes en diferentes tamaños, pulseras e incluso una gargantilla.

Los más llamativos son unos pendientes XXL creados con dos cordones de zapatillas en forma de lazo, al que se añade un pequeño detalle con el nombre de la marca en el nudo. ¿El precio? 195 euros. Una cantidad que aumenta en los pendientes cortos, marcados con la icónica B en el cierre de la joya, que se anuncian a 250 € en su web en sus dos colores disponibles: rosa y negro.

Y, como ir combinada es importante, Balenciaga añade en esta colección la posibilidad de adquirir la pulsera en diferentes tonos por casi 200 € e, incluso, el diseñador georgiano ha usado el mismo cordón para crear el chocker a juego, un complemento que puede ser tuyo por 350 €.

Gvasalia no frena ahí, también parece haber tomado inspiración de modas adolescentes pasadas y reinventa los complementos con imperdibles, en este caso de plata de ley, quitándole su matiz punk. Así, en breve será posible comprar unos pendientes, una pulsera o un collar íntegramente hechos con este elemento por unos cientos de dólares.