Rémy Martin XO X Atelier Thiery: la sublime relación entre el oro y el coñac

Un verdadero ejemplo de savoir faire es especializarse durante generaciones en perfeccionar un producto. Este es el caso de Rémy Martin, una casa de coñac fundada hace casi tres siglos y de Atelier Thiery, un estudio de París. Y, juntos, han creado algo excepcional: un decantador XO de edición limitada, adornado con una serigrafía de esmalte en pan de oro hecha en parte con oro de 18 quilates.

Excelencia tanto fuera como dentro. Para dar con este nuevo decantador, Rémy Martin también ha recurrido a la ayuda del diseñador Charles Kaisin para crear una escultura, dando una nueva dimensión al pan de oro.

Las similitudes entre el coñac y el oro son más amplias de lo que parece: la experiencia necesaria, la intemporalidad, las inspiraciones compartidas, el prestigio y el simbolismo. Para celebrar esta relación y ensalzar el nuevo decantador XO, el diseñador belga Charles Kaisin ha inmortalizado una obra de arte monumental. Se trata de una colección de 1.724 centauros individuales decorados con oro por los maestros del Atelier Thiery. Un bellísimo homenaje a la legendaria trayectoria de Rémy Martin. No podría haber elegido mejor símbolo que el centauro, que lleva acompañando a la casa desde sus orígenes.

Una historia centenaria

La historia de Rémy Martin nació en 1724. En este año, el joven viticultor francés del mismo nombre empezó a vender coñac. El rey Louis XV reconoció la extrema calidad del coñac y le dio permiso de plantar nuevas vides. Mucho ha llovido desde entonces y hasta ahora, donde tras nueve generaciones la firma de coñac sigue erigiéndose como una de las más prestigiosas del mundo.