¿Cuál es el origen de la tradición de los niños de San Ildefonso y cómo son elegidos para cantar los números de la Lotería de Navidad?

En algún momento de nuestra vida, seguramente durante el sorteo de la Lotería de Navidad, todos hemos dicho eso de “miiiiiiil eurooooos” al mismo tiempo que los niños de San Ildefonso cantaban algún número premiado del navideño sorteo. Y pese a que esta frase es una de las bandas sonoras de la Navidad en España, muy pocos conocen el origen de su historia y cómo son elegidos estos niños.

El origen

Aunque esta tradición se mantiene desde el primer sorteo oficial de la Lotería de Navidad celebrado en 1812. Esta representativa práctica se remonta al 9 de marzo del año 1771, durante el reinado de Carlos III. En esa época, un niño llamado Diego López se convirtió en el primer estudiante del colegio San Ildefonso en cantar los números de la lotería, aunque no se sabe con certeza por qué fueron elegidos. Existen múltiples teorías, una de ellas es que los alumnos ya cantaban por las calles y plazas de la ciudad y, hacerlo durante el sorteo, fue simplemente otra forma de recibir limosna.

Fundado en Madrid en 1543, el emplazamiento fue un orfanato hasta la llegada de la Democracia y, posteriormente, pasó a ser un colegio masculino hasta 1981. Sin embargo, tuvieron que pasar tres años, hasta 1984, para que las niñas se unieran al resto de sus compañeros y compartieran el papel de cantar los números del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad. A finales de los años90 el centro sufrió un gran cambio, pues tras más de 200 años de historia, el colegio se dividió en dos instituciones. Por un lado, una residencia/internado, en la que conviven alrededor de 60 niños cuyos familiares necesitan apoyo del centro por motivos económicos y, por otro, un colegio público dependiente de la Comunidad de Madrid. De estas dos instituciones, los niños escogidos para entonar el sorteo de la Lotería de Navidad pertenecen a la residencia/internado.

¿Cómo son elegidos?

El colegio, antes de escoger a los elegidos, realizan una audición donde escuchan a todos los niños del centro que se presentan. Haciendo posteriormente una selección en base a requisitos como ser mayor de 8 años, ya que los más pequeños no suelen tener un gran dominio de la lectura de los números, por lo que no es habitual que participen cantando los premios navideños sino en otras funciones tras bambalinas, tener una buena fluidez verbal o una buena voz. La elección de los participantes tiene lugar aproximadamente en octubre, dos meses antes del sorteo, que se celebra cada año el 22 de diciembre. Una vez seleccionados, los niños comienzan a ensayar una media hora todos los días hasta el esperado día en el que reparten felicidad y sueños en el tradicional evento navideño.