Vieja guardia vs nueva guardia

Los socialistas madrileños eligen hoy entre Juan Segovia, respaldado por los barones del PSM y Sara Hernández, alcaldesa de Getafe y favorita del aparato regional

Jornada decisiva en el convulso Partido Socialista de Madrid. Los militantes escogen a su nuevo secretario general en unas elecciones primarias que pueden hacer temblar los cimientos de Ferraz. En un rincón, Juan Segovia, diputado regional y respaldado por la antigua dirección del PSM. Y en el otro, Sara Hernández, alcaldesa de Getafe y representante de la renovación que emprendió el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, el pasado febrero cuando impuso una gestora en el partido en Madrid. Ambos se presentan como renovadores y niegan encabezar corriente alguna, pero los apoyos de uno y otra revelan que asumir el reto de suceder a Tomás Gómez tiene una lectura que llega mucho más lejos.

Pese a que muchos esperaban que, pasado el tumulto que supusieron la destitución de Tomás Gómez y la elección de Ángel Gabilondo como candidato, Sánchez esperaría a septiembre antes de revolucionar de nuevo la dirección de Callao –ahora en manos de Rafael Simancas como presidente de la gestora–, después de lograr su proclamación como candidato a las elecciones generales ha decidido resolver la cuestión madrileña cuanto antes. Así, muchos interpretan el adelanto de las primarias en el PSM como un golpe de mano del secretario general ,que quiere reafirmar su control sobre la díscola federación.

No hay que olvidar que Tomás Gómez fue elegido candidato para las elecciones autonómicas sin necesidad de pasar por primarias, ya que ningún competidor logró los suficientes avales. Es por ello que el amplio sector tomasista apuesta por Segovia para derribar a quien derrocó a su incontestable líder. Entre sus respaldos más destacados se incluyen el ex presidente del Gobierno, Felipe González, de quien incluso obtuvo el aval, y su homólogo, José Luis Rodríguez Zapatero. Con él también está el ex alcalde madrileño Juan Barranco o la regidora de Aranjuez, Cristina Moreno. Aunque quizás el apoyo más llamativo, además del de Tomás Gómez, es el de Eduardo Madina, que se enfrentó a Sánchez hace un año en primarias. Entre sus fortalezas se encuentra también su puesto de diputado en la Asamblea de Madrid, lo que le da más facilidad para cuestionar la acción del Gobierno de Cristina Cifuentes.

Frente a él, y con todo el aparato de Ferraz a su favor, Sara Hernández lleva la medalla de haber recuperado la alcaldía de Getafe para los socialistas y, por si eso fuera poco, cuenta con el apoyo de Rafael Simancas, de cuyo equipo forma parte, así como del regidor mostoleño y ex portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, David Lucas, y del sempiterno alcalde de Fuenlabrada, Manuel Robles. Asimismo, logró más de 5.000 avales entre la militancia –casi un tercio de los afiliados, frente a los cerca de 3.000 obtenidos por Segovia–. Sin embargo, Hernández está salpicada por el «caso Aparcamientos», de tráfico de influencias en el consistorio getafense, que forzó la dimisión del socialista Pedro Castro, de quien la candidata era primera teniente de alcalde.