Lissavetzky reaviva su pique con Carmona: «Le deseo que pierda»

«Si yo fuera alcalde de Madrid...». Aunque nunca el diputado socialista Antonio Miguel Carmona se ha postulado de manera oficial como aspirante a la alcaldía de la capital, en más de una ocasión, en el fragor de alguna de las tertulias televisivas que frecuenta, se le ha escapado esta frase en la que deja entrever su intención de plantar batalla por la ciudad de Madrid en las municipales de 2015. Estos pequeños guiños y, especialmente, la maratoniana agenda que Carmona ha mantenido durante el verano no han hecho más que acrecentar los rumores en torno a esta posibilidad. Deseos más o menos velados de convertirse en el candidato socialista que han despertado cierto malestar en el entorno del otro posible aspirante a liderar la candidatura en la capital: Jaime Lissavetzky.

El actual portavoz de los socialistas en el consistorio y cabeza de cartel en los comicios de 2011 sí ha hecho público su deseo de volver a concurrir en los comicios del próximo mes de mayo. Ayer, preguntado por su opinión respecto a que Carmona pudiera postularse como candidato, trató de evitar, aunque sólo en un primer momento, cualquier polémica: «La de concurrir a las elecciones primarias se trata de una decisión del ámbito individual». No pudo, sin embargo, añadir otra reflexión que no ha hecho más que reavivar el pique entre ambos al subrayar que, si Carmona decidiese finalmente presentarse, le desearía que «pierda», no por algo personal, sino porque, aseguró Lissavetzky, quiere cumplir su «compromiso con Madrid». Recordó el actual portavoz socialista a este respecto que él ya dejó claro que «no saldría de Madrid» sin haber estado dos mandatos en el ámbito municipal, compromiso en el que se reafirmó ayer. Y zanjó el tema –tras recordar que también Enrique del Olmo ya ha anunciado su intención de concurrir a las primarias– al asegurar que Carmona «era y sigue siendo su amigo». Estas primeras reflexiones en público de Lissavetzky sobre su eventual «rival» en las primarias llegan apenas un día después de que este diario informara de que hoy el propio Carmona iba a encabezar una delegación del Partido Socialista y de UGT al suburbano de Madrid, en cuyos preparativos –en concreto, en la carta en la que se detallaba el nombre de las personas que visitarían el Metro– los responsables del sindicato aseguraban que Carmona acudiría en calidad de «concejal del Ayuntamiento de Madrid». Tras conocerse el lapsus en el actual cargo de Carmona –es diputado autonómico en la Asamblea–, el sindicato remitió ayer una nueva misiva dirigida al consejero delegado de Metro de Madrid en la que le informaba de la cancelación de la visita. ¿La razón? El «concejal» Carmona –«cabeza de la delegación», según UGT– había sido «requerido» por Pedro Sánchez para acompañarle a un acto oficial que se celebra también hoy.