Tras cinco horas de intenso debate, en las que pidieron la palabra más de una treintena de dirigentes de Izquierda Unida para tratar la situación de la federación madrileña, la «vieja guardia» ha salido vencedora frente a los de Tania Sánchez, candidata a la Comunidad de Madrid, que pretendían intervenir en la actual dirección de IUCM para hacerse con el poder. Después de meses de ponerse de perfil ante la guerra desatada entre los partidarios de la tertuliana, vencedora en las primarias, y la dirección colegiada que dirige el partido en Madrid tras la dimisión de Eddy Sánchez, finalmente la dirección nacional ha inclinado la balanza hacia los que quieren mantener las siglas y la formación en la región en lugar de entregar su infraestructura a Podemos.

Sobre la mesa estaba la decisión de echar o no a los portavoces en la Asamblea y el Ayuntamiento de Madrid, Gregorio Gordo y Ángel Pérez, por su responsabilidad política en el escándalo de las «tarjetas black». Una circunstancia enarbolada por los de Tania Sánchez como excusa para quitar de enmedio a la actual dirección regional del partido integrada y poder seguir su hoja de ruta para disolver IUCM al servicio de Podemos. Para ello contaba con el respaldo del diputado nacional y candidato de IU federal, Alberto Garzón –que ayer abandonó la reunión un ahora antes de que terminase clamando por la expulsión de Gordo y Pérez– y el ex secretario de convergencia de IU, Enrique de Santiago, que habían aunado a varios coordinadores regionales para pedir no sólo la cabeza de los portavoces sino la intervención de la federación autonómica.

Sin embargo, el asalto al poder de Tania ha sido en vano; «ha perdido», valoró la diputada regional de IU, Libertad Martínez. La Presidencia de IU ha rechazado tanto la expulsión como la intervención en IUCM. En su lugar, se abrirá un expediente a Gregorio Gordo y Ángel Pérez por su responsabilidad política en el comportamiento de los consejeros que la formación tenía en Caja Madrid y del escándalo de las tarjetas opacas. Por este motivo, desde la dirección de IUCM se consideraba «no satisfactoria» la resolución puesto que «desautoriza» a sus portavoces. Con todo, hicieron un llamamiento a la normalidad y explicaron que en la federación madrileña se comenzará ahora a preparar la campaña electoral y se elaborarán las listas en el Consejo Político Regional. Un órgano en el que el sector de Tania Sánchez no tiene poder, de ahí que quisiera desacreditar a la actual dirección regional.

La formación aprobó el pasado martes acudir a la convergencia con los movimientos sociales, pero en coalición de partidos –manteniendo las siglas de Izquierda Unida–, y no disuelta en Ganemos como daba por hecho esta organización el pasado jueves al presentar su acuerdo con Podemos para concurrir a las elecciones municipales. Al respecto, Martínez señaló que, pese a lo que afirmó entonces el candidato de IU a la alcaldía madrileña, Mauricio Valiente, sobre que serían las bases de IU las que ratificasen el acuerdo Ganemos-Podemos, «los estatutos de Izquierda Unida especifican que las listas sólo se elaboran en el Consejo Político Regional».

La candidata pierde sus apoyos por su guiño a Podemos

La corriente Cambiar IUCM, que apoyó a Tania Sánchez en las primarias de la formación, ha retirado su respaldo a la diputada regional. En un comunicado, el sector acusa a Sánchez de «defender que se disuelva IUCM» y, por ello, rechazan seguir respondiendo por ella. Se da la circunstancia de que tres de los miembros de esta corriente: Jeannette Carmel, Miguel Ángel Gómez y Miguel Ángel García Herrero, forman parte de los cuatro miembros pro-Tania de la nueva dirección colegiada del partido regional, lo que supone que la diputada pierde todo el poder en los órganos de dirección de IUCM. Al respecto, el portavoz de su sector, Hugo Martínez, valoró que Cambiar IUCM ya se «autoexcluyó» al aceptar participar en la nueva coordinación colegiada que los de Tania rechazaron.