Después de que el Síndic de Greuges alertara en un informe hace una semana de que 50.000 niños sufren carencias alimenticias severas y 751 tienen problemas nutricionales por pobreza extrema, la oposición trató de forzar ayer la comparecencia de varios consellers para abordar el preocupante fenómeno en el Parlament, pero la mayoría de Convergencia i Unió y Esquerra Republicana de Cataluña lo impidió. La mayoría nacionalista sorteó las exigencias de la oposición durante la reunión de ayer en la Diputación y dejó en manos del Síndic de Greuges, Rafael Ribó, la ampliación de explicaciones sobre la malnutrición infantil.

Ribó comparecerá en una sesión que se celebrará el próximo 29 de agosto, convertido por obra y gracia de la mayoría soberanista en el auténtico día D de este mes a nivel político. Esa misma jornada también comparecerán el conseller de Economía, Andreu Mas-Colell, para detallar la prórroga presupuestaria, y también el titular de Territorio y Sostenibilidad, Santi Vila, para abordar la fallida privatización de Aigües Ter Llobregat.

«Convergencia intenta tapar el debate de los presupuestos con otros debates que no tienen nada que ver», concluyó el portavoz parlamentario del Partido Popular, Enric Millo, muy crítico las escasas explicaciones que el Govern ha ofrecido sobre cómo se van a aplicar los recortes en el conjunto de departamentos. «Hay un intento permanente de CiU de tapar como sea posible la inacción del Govern», añadió Millo.

En un sentido también crítico pero con otros argumentos se expresó la diputada del Partido Socialista de Cataluña Montserrat Capdevila. «Hemos podido ver cómo CiU y ERC evitan que el Govern dé la cara y explicaciones sobre una verdadera emergencia nacional», dijo Capdevila. La ex ministra de defensa Carme Chacón se sumó a las críticas en un sentido más contundente acusando a CiU y ERC de «venderse el alma para seguir en la silla». «Qué fácil es gobernar en tiempos de vacas gordas. Llegan las flacas y toca abrazar el programa de ERC para existir», concluyó Chacon.

PSC, PP, ICV y C's censuraron el «fraude democrático» que supone vetar la comparecencia de los titulares de Ensenyament, Irene Rigau; Bienestar y Familia, Neus Monté; y Economia, Andreu Mas-Colell, para abordar el fenómeno de la malnutrición infantil en Cataluña. «Es impresentable», llegó a decir el diputado de ICV Josep Vendrell.

En paralelo a esta polémica, los formaciones catalanas reprocharon al Partido Popular que se plantee no acudir a los actos institucionales de la Diada en el parque de la Ciutadella con el argumento de que van a ser similares a los del año pasado. El PP no quiere participar en una Diada independentista, pero aún no ha tomado una decisión.

Crece la pobreza infantil en Cataluña

23,8%

Según un estudio de Unicef la pobreza infantíl creció del 18,5% en 2008 al 23, 8% en 2010. La cifra habla a las claras de los debastadores efectos de la crisis económica en Cataluña y de la impotencia del Govern para frenar esta lacra.

2.865 niños

El ayuntamiento de Barcelona envió una circular a 500 centros escolares, tanto públicos como concertados, para conocer la verdadera dimensión del problema de la malnutrición infantil en la ciudad condal. Fueron detectados 2.865 niños con alimentación deficiente solo en Barcelona.

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CiU no urge la respuesta de Rajoy a Mas

CiU no tiene prisa por conocer la respuesta del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a la carta que le envió el presidente catalán, Artur Mas, para celebrar un referéndum de autodeterminación, aunque sí que le reclama «altura de miras» en su réplica. En declaraciones a Catalunya Ràdio, el portavoz del grupo de CiU en el Parlament, Jordi Turull, instó al jefe del Ejecutivo a «no mirar hacia otro lado» ante la reivindicación de que los catalanes se puedan pronunciar sobre su futuro en una consulta, y si bien reiteró la «voluntad» de diálogo y negociación de su partido con el Estado, precisó que el proceso tiene unos «tempos» fijados. En este sentido, Turull avanzó que su partido quiere consensuar la fecha y la pregunta de la consulta a finales de este año, una pregunta que debe ser «clara y concisa» y con un «sí o un no» como respuesta, así como el instrumento para poder convocarla de forma «legal» y con todas las «garantías». «Entendemos las prisas, pero tenemos la responsabilidad de hacerlo bien», precisó.