El líder del PP catalán arremete contra los independentistas que buscan el choque institucional y anuncia medidas para Cataluña desde el Senado.

El llamado conflicto catalán reúne muchos ingredientes para que se alargue en el tiempo. Hay barullo entre las instituciones, hay una montaña de temas en los tribunales, hay agitación en las calles y hay un cruce de acusaciones continuo a través de los medios de comunicación. Por fortuna, no hay injerencia militar ni la va a haber. «Algunos están deseando que entre el Ejército por la avenida Diagonal y no ocurrirá», afirmó ayer el coordinador del PP catalán, Xavier García Albiol, en respuesta a Artur Mas, quien, horas antes, aseguró que el Gobierno está preparando el «caldo de cultivo» para «intervenir» en Cataluña.

García Albiol contraatacó así las últimas acusaciones del soberanismo, que ahora dice estar convencido de que el Estado intenta vincular el movimiento independentista con la violencia para «justificar una intervención en Cataluña». A su entender, sólo así se explica la reciente denuncia de la fiscal jefe de Barcelona, Ana Magaldi, quien esta semana hizo público el acoso y los insultos que sufrió a la salida del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) tras el juicio a Mas por el 9-N.

Albiol negó toda verosimilitud a la teoría de Mas y aseguró que no es necesario el uso de la fuerza para la aplicación del orden constitucional. Recordó, además, que hay instrumentos para hacer respetar la Constitución de forma «legal y pacífica». «Los únicos que hablan de violencia que van más allá del Estado de Derecho son los dirigentes de la CUP», zanjó el dirigente del PP en alusión a unas polémicas declaraciones de Quim Arrufat («Proponemos la convocatoria del referéndum unilateral de independencia con todas las de la ley, hasta el final, como mínimo para hacer entrar en contradicción antidemocrática al Estado español y que tena que recorrer a algún tipo de fuerza legal o incluso de fuerza bruta»).

el corredor mediterráneo

Los populares no piensan dejar sin respuesta las acusaciones de sus adversarios. Pero, en paralelo, tratan de dar contenido a la denominada «operación diálogo». Albiol se rodeó ayer en el Parlament de una comitiva del grupo del PP en el Senado para anunciar dos iniciativas en la Cámara alta destinadas a dar impulso a dos asuntos catalanes. Consistirán en presentar mociones en apoyo de los Juegos del Mediterráneo en Tarragona –que debían disputarse en 2017 pero se han retrasado un año por falta de financiación– así como del Corredor Mediterráneo.

El portavoz del PP en el Senado, el lucense José Manuel Barreiro, enfatizó la implicación de su partido con Cataluña. «El grupo popular catalán es el más importante que hay en el Senado por una razón: somos prácticamente 150 senadores que estamos al servicio de Cataluña y del conjunto de la sociedad catalana», dijo Barreiro, que insistió en repetidas ocasiones en la importancia que tiene para su formación «que se sienta el compromiso claro y firme del grupo del PP en el Senado con el conjunto de la sociedad catalana».

A continuación, Albiol dirigió un mensaje a los socialistas para lograr su apoyo a los presupuestos generales del Estado, ya que, de lo contrario, no podrán adquirirse nuevos compromisos económicos para impulsar el corredor mediterráneo y los Juegos de Tarragona. Recordó en este punto que los socialistas ostentan el gobierno municipal de Tarragona para incrementar la presión y lograr su respaldo.