La localidad leonesa de Villadangos del Páramo se convertirá en el polo metalúrgico del noroeste español. Así lo aseguró la consejera de Economía y Hacienda de la Junta, Pilar del Olmo, tras el anuncio de que será la empresa familiar Network Steel la que compre la planta de Vestas.

La compañía, dedicada a la comercialización de productos de acero, aprovechará las instalaciones que deja la multinacional danesa y abrirá nuevas naves para crear hasta 350 empleos directos y 900 indirectos.

En este sentido, Del Olmo explicó que la firma generará más puestos de trabajo de los previstos inicialmente y que, posiblemente, empezará a contratar trabajadores a mediados de marzo. «León y Villadangos están de enhorabuena», sentenció y ensalzó el «trabajo sigiloso» de su equipo.

«En el proceso de empleabilidad tendrán prioridad los antiguos trabajadores de Vestas», subrayó por su parte la ministra de Industria, Reyes Maroto, quien apuntó a que el Gobierno y la Junta se han comprometido a construir un ramal ferroviario y carreteras para facilitar la salida de la producción.

Network Steel, que ya cuenta con una planta en el municipio burgalés de Aranda de Duero, contempla una inversión de hasta 110 millones para componer una zona industrial de 35.000 metros cuadrados.

La culminación comercial del acuerdo entre ambas compañías se espera para antes de final de año y permitirá aglutinar en León un centro logístico y siderúrgico con acceso a los mercados de España y Portugal y bien conectado con los puertos.

«El diálogo social con los sindicatos que permitió el acuerdo del ERE ha facilitado también el proceso de reindustrialización. El apoyo de los trabajadores, del Gobierno y de la Junta ha sido fundamental para lograr este acuerdo tan rápido, que beneficiará a los trabajadores que deseen seguir en la planta de Villadangos, aunque dedicados a otra actividad», señaló el responsable de Recursos Humanos de Vestas, Carlos Molinero.

Por su parte, el secretario provincial de la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT, Francisco Romero, valoró el proyecto de la metalúrgica como «bueno y ambicioso» y manifestó que «tenemos que creer en ello» y confiar en que «se consiga controlar lo máximo posible» las condiciones de implantación de la empresa para «garantizar su permanencia y que no haya sustos».

Finalmente, Vestas mantendrá su actividad en Castilla y León a través de una oficina en la propia fábrica leonesa y con sus actividades de operación y mantenimiento de aerogeneradores a través de sus más de 200 técnicos. También tiene previsto instalar nuevos parques eólicos.