El consejero asegura que en noviembre la Sanidad se pondrá al día en el pago y que volverán a cumplir con los 30 días de plazo.

Un total de 350 millones de euros. Ésta es la deuda que mantiene la Consejería de Sanidad con sus proveedores cuando empezaba el mes de julio. Una cantidad superior a la que había el pasado año por estas mismas fechas, y un retraso que el consejero Sáez Aguado achaca al actual modelo de financiación autonómica, que es insuficiente para esta Comunidad, y a los gastos suplementarios que ha tenido que acometer su departamento para el tratamiento de los afectados por hepatitis C. Pese a ello, el consejero de Sanidad aseguraba ayer que en noviembre todo regresará a la normalidad y se pondrán al día en los pagos además de que se volverá a pagar a los proveedores a 30 días desde la emisión de la factura, como marca la Ley.

En cualquier caso, Sáez Aguado ponía en valor el trabajo que se ha venido haciendo desde su departamento y recordaba las dos operaciones acometidas a lo largo de este año para recuperar los tiempos de pago a proveedores. Por un lado, citaba el acuerdo que alcanzaba con las entidades bancarias para que las facturas que no pudieron pagarse en tiempo y forma las anticiparan ellas, para después devolvérselas progresivamente,. Y, por otro lado, la operación de endeudamiento llevada a cabo con el Ministerio de Hacienda, denominada «Confirming», y que según Sáez Aguado su autorización ha llegado con retraso provocando la creciente evolución de la deuda hasta junio, y con la que van a actualizar el pago a proveedores con el compromiso de estar dentro de los plazos que establece la legislación en el mes de noviembre. «En todo caso, el problema no es la cuantía de la deuda, sino el periodo medio de abono de lo que se deuda», apuntaba el consejero de Sanidad.

Sáez Aguado se expresaba de esta forma, ayer en Salamanca, momentos antes de participar en las XII Jornadas de Inspección Farmacéutica, que reúne en la capital del Tormes a más de doscientos profesionales de todas las regiones de la España autonómica así como de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps). Un encuentro que sirve para ahondar en los nuevos ensayos clínicos y su normativa, en los reglamentos de los productos sanitarios o en los dispositivos de seguridad de los medicamentos para reforzar la cadena legal de suministro frente a las falsificaciones.

Sobre este punto, y preguntado por los periodistas por los problemas ocasionados a pacientes intervenidos de desprendimiento de retina debido supuestamente al uso de un fármaco, el consejero pedía prudencia sobre este tema y explicaba que la Aemps todavía mantiene la alerta hasta que finalicen las investigaciones que se están llevando a cabo sobre si este medicamento (Ala Octa) es el causante de la ceguera sufrida por algunos de los pacientes operados.