Uno de cada cuatro fallecidos en carreteras de la comunidad va en moto

En julio y agosto se han registrado un total de 20 muertes, el peor dato en seis años

La siniestralidad en la carretera incide en mayor proporciÓn en los vehículos a dos ruedas. La comunidad ha registrado en los meses de julio y agosto de este año un total de 20 muertes de motoristas. Este verano es el peor de los últimos seis años. Se ha pasado de los cinco fallecidos de hace seis años, a los seis de 2015, los nueve en 2016, ocho en 2017 y once el pasado 2018. Julio se saldó con diez muertes: tres en Málaga y otras tres en Cádiz, además de dos en las provincias de Sevilla y Granada. En agosto, se han registrado otros diez fallecimientos. La mayoría de defunciones por accidentes de este tipo en estas fechas han sido de colisiones contra automóviles. Según los últimos datos de accidentalidad en las carreteras en España en relación a motocicletas y ciclomotores estudiados por la Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Seguridad Vial (Formaster) el 25,1% de los fallecidos en Andalucía es un motorista. Se trata de un aumento de 15 puntos y que alcanza el 40% en relación a los conductores de motocicletas o de ciclomotor heridos que necesitan hospitalización en la comunidad andaluza tras un accidente de tráfico. El cómputo de motoristas fallecidos en Andalucía está tres puntos por encima de la media nacional, que se sitúa en el 21,9%; y en relación a los heridos graves está 6 puntos por encima, que es del 34%.

Huelva es la provincia que menor siniestralidad en vehículos de dos ruedas tiene de toda Andalucía, con un 10,5% de los fallecidos motoristas, luego este porcentaje sube 15 puntos hasta situar los motoristas heridos graves en el 25%. En el otro extremo están Cádiz y Málaga como las dos provincias donde la siniestralidad de motos es más alta y con el mismo porcentaje (el 30% de los fallecidos en un accidente es motorista tanto en Cádiz como en Málaga), según los datos recogidos por esta asociación profesional. En relación a los heridos graves que necesitan hospitalización, en el caso de Cádiz sube 22 puntos hasta situarse en el 52,13% (el más alto de Andalucía y de toda España) y que sitúa a la provincia gaditana 12 puntos por encima de la media andaluza y 18 puntos por encima de la media nacional. En el caso de Málaga, el 47% de los heridos graves en un accidente es motorista (13 puntos por encima de la media andaluza). En relación a Córdoba, el 23% de los fallecidos en un siniestro vial fue motorista y en relación a los heridos graves el 39% fue conductor de un vehículo de dos ruedas. Estos datos en relación a Córdoba son comparables a los de Sevilla, donde el 23,5% de los fallecidos en carreteras o vías urbanas es motorista y en relación a los heridos graves sube 13 puntos hasta alcanzar el 36,1%. En el caso de la provincia de Granada el porcentaje de motoristas fallecidos es del 22%. El porcentaje de heridos graves que necesitan ser trasladados a un centro de salud asciende más de 24 puntos hasta llegar al 46,4% en esta provincia. En Jaén, el 26% de los fallecidos es motorista y tres puntos más en relación a los heridos graves: el 29%. Por último, en Almería el porcentaje de los heridos graves que necesitan ser trasladados a un hospital es más bajo que los fallecidos (17,6% de heridos sobre los 25% de fallecidos), es decir, los accidentes de vehículos de dos ruedas son muy graves y conllevan fallecimiento. El accidente más común en el que se ve involucrado un motorista es la salida de la vía o caída con un 38% de los accidentes seguido de la colisión frontolateral con un 29% y el alcance o colisión trasera con el 11% de los siniestros.

Por parte de los motoristas también hay que hablar de las infracciones que conllevan un alto riesgo de terminar en un accidente grave y con víctimas. La infracción más común en carretera con un 23% es la velocidad inadecuada, seguida por una conducción distraída, con un 19%, indicó Formaster. La tercera de las infracciones es, con un 17%, el incumplimiento de la prioridad en intersecciones.

La Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Seguridad Vial apunta a la falta de formación específica de los conductores de motos con carné B (este tipo de vehículos pueden ser conducidos por personas con tres años de carné de turismo). El 29% de los motociclistas implicados en un accidente con víctimas en España conducía una motocicleta de hasta 125 cc con carné de turismo. Un porcentaje que sube hasta el 40% en conductores entre 25 y 34 años. La siniestralidad de los motoristas que tienen licencia de motocicletas (carné A2) y con ello una formación específica y especializada en relación a vehículos de dos ruedas baja de forma considerable, llegando solo al 9% en general, e incluso en el rango de edad de 25 a 34 años, desciende al 6%. La Asociación Formaster considera que para poder conducir una motocicleta, de cualquier cilindrada, debería ser obligatorio tener el permiso de circulación de motos y haber pasado por una formación específica en relación a las motos y que el permiso B no ofrece el conocimiento práctico de cómo hay que conducir un vehículo de dos ruedas.

Mientras que los accidentes con víctimas crecen en España un 15%, los accidentes con víctimas de motocicletas han crecido hasta un 57%; y mientras que las víctimas mortales crecen en las carreteras un 8%, los motoristas fallecidos suben en más de cuatro puntos llegando al 12%.