Europa

Cataluña

Macarena Olona: «El totalitarismo y el sectarismo no entienden de ideologías»

La número uno de Vox al Congreso por Granada señala que “detrás” de la exhumación de Franco “irá el derrocamiento de la Monarquía y derribar la cruz del Valle de los Caídos”

Macarena Olona / Foto: EP
Macarena Olona / Foto: EPlarazon

La número uno de Vox al Congreso por Granada señala que “detrás” de la exhumación de Franco “irá el derrocamiento de la Monarquía y derribar la cruz del Valle de los Caídos”

-¿Cómo ve las encuestas, que les sitúan terceros?

–Ni hemos caído en el pesimismo cuando las encuestas cocinadas de Tezanos nos daban tres diputados ni en la euforia ahora que vaticinan romper la barrera de los 40 diputados. La encuesta a la que hacemos caso es el cariño de la gente, esos mítines abarrotados, y lo que no haremos es cambiar nuestro discurso en función de las encuestas, como especialmente hace Cs.

–Abascal insistió en el debate en la supresión de las autonomías y la regulación de la inmigración. ¿Son sus principales medidas?

–Son sobre las que se ha puesto mayor foco porque se ha tergiversado el mensaje. No estamos en contra de los inmigrantes como tampoco estamos contra las mujeres cuando proponemos una ley de protección intrafamiliar. Abogamos por una inmigración regulada, ordenada. Defendemos que la configuración del modelo territorial ha dado lugar a un Estado de bienestar de los partidos, no de la ciudadanía. Las autonomías han generado una profunda desigualdad. Vox defiende la recuperación de competencias esenciales en educación, seguridad, justicia No tiene sentido 17 reinos de taifas cuando la Nación propugna la igualdad.

–Ha habido mucha polémica con el acto en el que se habló de «manadas de Mena». ¿Cómo justifican la alerta?

–Se ha hecho un uso torticero, sobre todo por parte de Teresa Rodríguez, que ha amenazado con querellas. No hubo discurso del odio por parte de Vox. No señalamos políticamente a los menores, sean o no españoles, lo único que estamos diciendo es que la irresponsable política de inmigración del Ejecutivo socialista da lugar a una absoluta inseguridad jurídica, a un agravio respecto a inmigrantes que vienen como los españoles han ido a otros territorios a buscarnos los garbanzos, de manera ordenada, y cumpliendo la legalidad. Lo que no es posible es que se mantenga la actual política de efecto llamada, porque da lugar a una absoluta inseguridad, al crecimiento de la delincuencia y al final ni los inmigrantes están adecuadamente atendidos, porque no tenemos infraestructuras suficientes, ni los españoles estamos seguros porque no hay un control adecuado. En Motril tenemos un punto caliente de entrada donde Salvamento Marítimo tiene que estar atendiendo a inmigrantes que vienen de manera irregular y es puesto por el Ejecutivo socialista al servicio de esas redes ilegales de tráfico de personas.

–Otro punto polémico está siendo el veto a periodistas en mítines. ¿Por qué limitan la libertad de prensa?

–Nos oponemos a profesionales que no son tales sino activistas políticos al servicio de ideologías muy determinadas que van en contra de la libertad de expresión periodística.

–¿Cómo explica su expulsión de la Diputación Permanente?

–He vivido en primera persona la tergiversación de los hechos. Ante el incumplimiento del reglamento que impidió a una diputada a hacer uso a su derecho fundamental, lo que se trasladó es casi que había sido una antisistema y había montado un espectáculo, cuando la lógica nos dice que con la crisis de Cataluña no tiene sentido que se hablase en los platós y no en la Cámara. Vimos una expulsión dictatorial y sectaria. El totalitarismo y el sectarismo no entienden de ideologías. Hay que preocuparse mucho cuando el PSOE tiene de brazo ejecutor a la presidenta del Congreso y lo usa para incumplir la legalidad.

–¿Qué pide para Granada?

–Las canalizaciones de Rules son las piscinas más caras de Europa, con más de 20 años de retraso en las canalizaciones. La última tasa de paro nos sitúa a niveles de 2012. Estamos viviendo una emergencia social y nacional. Estamos hablando de valores como la familia, la protección de los mayores, de la vida. A la administración se le puede poner corazón.

–¿El modelo andaluz es exportable?

–Habrá que ver la fórmula más adecuada. Espero que el apoyo nos lo tengan que dar a nosotros. Se está demostrando que no hemos antepuesto sillones al interés general y que nuestros votos son decisivos, encausando la política y para embridar a PP y Cs con logros como la lucha anticorrupción, tras 40 años de tiranía roja, con una auditoría independiente del sector instrumental.

–¿Les ha hecho la campaña Pedro Sánchez con Franco?

–No creo que la exhumación política vaya a dar ningún rédito a ninguna formación . Espero que los españoles castiguen en las urnas a un Ejecutivo socialista indecente que se ha atrevido a profanar una tumba. A los muertos hay que dejarlos tranquilos y me da igual que sea Franco o la Pasionaria. Franco es la excusa. Detrás irá el derrocamiento de la Monarquía y derribar la cruz del Valle de los Caídos.

–¿España es plurinacional?

–El Ejecutivo socialista no tiene claro ni lo que es España porque se guía por los apoyos puntuales que va precisando. La Constitución habla de nacionalidades y regiones y parte de la indisoluble unidad de la Nación.

–Decía que Vox es un partido con corazón, sin embargo defienden por ejemplo que los homosexuales tengan menos derechos a la hora de adoptar.

–No me gusta focalizar por razón de sexo. Atendemos al superior interés del menor, con una valoración objetiva, que exige un referente paterno y otro materno. No discriminamos por razón de sexo, por supuesto. El interés superior del menor es el objetivo prioritario. Es un escenario aséptico, lo que no quita que haya familias monoparentales que por circunstancias hayan dado todo el cariño del mundo y todo lo que se requiere para la educación de los niños.