En los últimos años se han producido avances importante en este terreno, pero también hay circunstancias inamovibles como la mayor presencia masculina en los órganos directivos de las empresas públicas.

La igualdad de género es una de las banderas que más ondea la Junta de Andalucía. En los últimos años se han producido avances importante en este terreno, pero también hay circunstancias inamovibles como la mayor presencia masculina en los órganos directivos de las empresas públicas. Y eso que Manuel Chaves, al calor de su última campaña como presidenciable en el año 2008 prometió que si revalidaba el cargo una de sus principales medidas iba a ser «exigir» la paridad en los consejos de administración de las empresas con más de 250 trabajadores.

El informe de evaluación de impacto de género que acompaña a los Presupuestos es muy claro al respecto. En relación a las agencias públicas empresariales, sociedades mercantiles y entidades asimiladas recoge que «el índice de presencia relativa de hombres y mujeres (el indicador Iprhm) del personal directivo del conjunto de estas entidades instrumentales es de 0,67». Se sitúa por tanto «por debajo de los valores que determinan una representación equilibrada, entre el 0,80 y el 1,20». «En el conjunto de las entidades instrumentales, el porcentaje de hombre está por encima del 60 por ciento, concretamente representan el 66 por ciento, mientras que las mujeres el 34». Lejos de avanzar en paridad en los centros directivos, se produce incluso un leve retroceso, ya que el índice Iprhm en 2015 era de 0,69.

La Junta se escuda para justificar el desequilibrio en los centros directivos en lo que ocurre en el sector privado. «Estos datos pueden entenderse mejor si se contextualizan con lo que acontece en el ámbito estatal en el sector privado, ya que según la Comisión Nacional del Mercado de Valores la presencia de mujeres en los consejos de administración de las empresas del Ibex 35 en 2015 se cifró en un 19 por ciento, y en 15,6 por ciento en el conjunto de las entidades cotizadas».

La comparación no oculta, en cualquier caso, la contradicción de discurso en el que incurre la Junta. En las agencias empresariales se dan de hecho algunas situaciones llamativas: «sólo hay hombres entre el personal directivo de la Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía (Amaya)», la de mayor peso en cuanto a presupuesto y número de trabajadores de todas las que se constituyeron en 2011 tras la reordenación –polémica– del sector público empresarial. La Agencia de Obras Públicas de la Junta, en el momento en el que se elaboró el informe, también estaba compuesta por un organigrama directivo de hombres exclusivamente.

El informe de evaluación de impacto de género del Presupuesto es el undécimo que elabora la Administración autonómica. La mayor presencia de hombres que de mujeres en los puestos de dirección de las empresas públicas ha aparecido de manera invariable en todos, pero hasta el momento no se ha corregido. Con todo, la Junta señala en el informe de este año que «la igualdad de género es una condición ‘sine qua non’ para que se produzca un desarrollo social y económicamente sostenible, por lo que es fundamental seguir invirtiendo en la reducción de las brechas que todavía existen entre mujeres y hombre en Andalucía, tratando de contrarrestar los posibles retrocesos sufridos en los años de crisis económica».

El avance en la elaboración de los Presupuestos desde una perspectiva de género fue uno de los asuntos en los que insistió la consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, tras la aprobación del Proyecto de Ley por parte del Consejo de Gobierno. El programa G+ que se inició en el año 2007 desarrolla una metodología para integrar la perspectiva de género en los proyectos y en las políticas presupuestarias de la Junta. La titular de Hacienda señaló como uno de los logros de las cuentas de 2017 que este programa integra 18.112 millones de euros, el 74 por ciento del gasto no financiero, con un crecimiento de 706 millones de euros respecto a este ejercicio. Además del programa G+ la Junta también ha implantado el programa G, que también crece en 536 millones.

El PSOE señala que las cuentas rompen brechas

Tras la presentación de las cuentas, la portavoz de Igualdad y Bienestar Social del PSOE en el Parlamento, Soledad Pérez, resaltó la importancia de los programas G+ que miden la igualdad, rompen brechas de género y recorren todo el Presupuesto, adujo. Se felicitó asimismo de que «el 74 por ciento» de las cuentas «garantizan la igualdad de oportunidades». La Junta inició en 2003 la estrategia de integración del enfoque de género a través del Presupuesto. En 2010, aparejado al programa G+, la Consejería de Hacienda puso en marcha el fondo G+, a través del cual la Junta ha otorgado subvenciones públicas para el fomento de la igualdad de género.