Quien fue durante algún tiempo la «obsesión» del cantante, es imagen de una prestigiosa marca de vestidos de novia.

Un «like» de Justin Bieber en Instagram y una campaña con Kanye West, el marido rapero de Kim Kardashian, le cambió la vida a Cindy Kimberly, una joven alicantina de 17 años y de origen holandés. Hasta el punto de convertirse en imagen de Rosa Clará en la inauguración de la última gran tienda, la número 140, que la diseñadora ha abierto en Alicante.

Tan sólo le quedan diez días a esta modelo para ser mayor de edad. Criada a pocos kilómetros de este emporio nupcial, en Denia, es la encargada de hacer la botadura de un espacio de 250 metros cuadrados que será el lugar de peregrinación de toda casadera, incluida la propia Kimberly, cuando decida dar ese paso. «Obviamente, ahora mismo no pienso en casarme, pero el día que lo haga, sin duda, podría ponerme un vestido de Rosa Clará. Tengo casi 18 años y no tengo tiempo para novios ni para novias. Paso el tiempo leyendo, formándome y con mis gatos. No lo necesito ahora mismo porque soy muy joven».

Con ella estuvimos hablando a raíz de su «encuentro» virtual con Justin Bieber, un «tonteo» que le cambió la vida. Y todo gracias a las redes sociales, donde la joven tiene más seguidores en Instagram que Sara Carbonero o Paula Echevarría, concretamente, 1,7 millones.

–¿Es tan dulce como su nombre?

–Ja, ja, ja... Me llamo así porque mi madre se llama Candi, de Candida, y ella quería algo parecido para mí, que sonara como su nombre. Solamente nos diferencia una «i». Mi madre es mi ídolo, un modelo a seguir. Me ha criado sola desde que yo tenía tres años. Hasta ahora vivíamos en Denia y ahora nos trasladaremos a Barcelona.

–Sin ser aún mayor de edad ¿se gana la vida como modelo?

–Básicamente, sí. También estoy estudiando en una escuela privada de interpretación, porque me gustaría ser actriz en un futuro.

–Un «me gusta» en Instagram le cambió la vida...

–Supongo que sí. Realmente es así como funcionan ahora las cosas. Justin Bieber publicó una foto mía en su perfil de Instagram y preguntó quién era esa chica. Alguien se lo dijo y desde ahí decidió seguirme y me dio un «like» a varias de mis fotos. Yo ya le seguía y por supuesto que me enteré, pero no le hice ningún comentario porque sabía que no lo iba a ver.

–¿Y cómo la encontró Justin Bieber?

–Otras personas me buscaron y le pusieron en la foto quién era yo. Me siguió en Instagram durante seis meses, hasta que el pasado verano decidió cerrar su cuenta. Ese fue mi único contacto público con él.

–¿Ese «like» la convirtió en modelo?

–Mañana hará un año que hice mi primer trabajo en esta profesión. Fue una sesión de imágenes en Arizona para la colección de ropa de Kanye West, porque tenemos algunos amigos en común con las Kardashian. Mi sueño fue siempre dedicarme al mundo de las pasarelas y Bieber me ha ayudado. Me ha cambiado la vida.

–¿Cuando era más pequeña forrabas sus carpetas con fotos de él?

–Por supuesto, y con 11 años, tenía toda la pared llena de pósters de Bieber. Luego me cansé y los quité. Pero tengo muchos de sus discos y como artista le tengo en estima, porque me gusta.

Justin Bieber llegará en unos días a nuestro país con su «Purpose World Tour» donde tiene previstos dos conciertos, en el Palau Sant Jordi de Barcelona y en el Barclaycard Center de Madrid. Quién sabe si en su estancia en España aprovechará para conocer en persona a la que en su día fue su «obsesión».