Elecciones en Estados Unidos
Rubio y Cruz se enzarzan por ver quién es más duro en política migratoria
El último debate entre los seis candidatos republicanos por la nominación ha sido uno de los más tensos de todos los celebrados hasta ahora. Los aspirantes cargaron contra los inmigrantes y se enzarzaron en política exterior. Tampoco pasaron por alto la muerte del juez conservador del Supremo Antonin Scalia, que deja una vacante clave en esta institución. Jeb Bush salió fortalecido; algo peor pintó para Donald Trump, mientras que Marco Rubio y Ted Cruz discutieron agriamente por demostrar –en español– cuál de los dos candidatos es más duro contra los inmigrantes irregulares.
Trump arremetió con dureza contra Bush por apoyar la invasión de Irak. La ofensiva de Trump se produce justo antes del mitin que el ex presidente George W. Bush y Jeb tienen previsto celebrar juntos en Carolina del Sur, con el objetivo de impulsar la campaña de su hermano, que, pese a disponer de grandes fondos para financiarla, no está obteniendo los resultados previstos. De hecho, los analistas creen que si no gana en la votación de Carolina del Sur el próximo sábado, podría quedarse fuera de la carrera por la Casa Blanca.
El gobernador de Ohio, el moderado John Kasich, que quedó segundo en las primarias de New Hampshire, echó mano de su conocido pragmatismo para tratar de rebajar el tono del debate, plagado de descalificaciones. «Mentiroso» y «desagradable» fueron los descalificativos con los que respondió Trump a Cruz, que en las primarias de Carolina del Sur parte con un 17% de apoyo, muy por debajo del 35,5% del magnate.