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Visita a España

Lula matiza ante las críticas y condena ahora la invasión de Ucrania

El presidente de Brasil se compromete a trabajar a favor de una salida a la guerra durante su gira europea

El presidente de Brasil, Lula da Silva, en la Casa de América de Madrid EUROPAPRESS

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, busca en su primera visita a Europa una salida diplomática a la guerra de Ucrania, según dijo hoy en su primera visita a España tras ser elegido como máximo mandatario del país suramericano.

Lula da Silva se reunirá mañana, miércoles, en Madrid con el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, mientras que con el presidente francés, Emmanuel Macron, espera conversar "la próxima semana", según manifestó hoy durante el encuentro empresarial Brasil-España celebrado en la Casa de América en Madrid, donde se encuentra de visita oficial.

La visita a España forma parte de una gira que ha llevado al mandatario brasileño a China y Portugal, donde ya hizo declaraciones sobre la invasión de Rusia en Ucrania y se ofreció como mediador para resolverlo.

"La Unión Europea jamás pensó que podría haber pasado y no se puede aceptar que un país invada la integridad de otro, nadie está hablando de eso, pero ¿hasta cuándo va a durar esa guerra, quién va a intentar resolver esa situación?", se preguntó.

Por ello, adelantó que tratará este tema con el presidente del Gobierno español e intentará "marcar un encuentro la próxima semana con Macron" que pretende que sirva "para traer la paz de vuelta a nuestra querida Europa, fundar un movimiento para que no nos quedemos pensando en la posibilidad de una tercera guerra mundial o en el uso de armas nucleares".

Asimismo, pidió alcanzar "un denominador común" para obtener la paz: "Estoy convencido de que vamos a llegar, Brasil está empeñado en conseguir socios para que Ucrania pueda quedarse con su territorio y el mundo no sufra de falta de alimentos y fertilizantes y pueda prosperar".

Lula ya se pronunció en Portugal sobre Ucrania, al apostar para que se cree un grupo de diálogo por la paz entre distintos países, en lo que denominó ¿una tercera vía¿ que facilite negociaciones que acaben con la guerra.

Esas declaraciones del mandatario brasileño llegaron tras las críticas que vertió a Estados Unidos y la Unión Europea por proporcionar armas a Ucrania, al considerar que de esa forma se prolonga el conflicto.

El presidente brasileño confió en que la presidencia española de la Unión Europea (UE) impulse el acuerdo con Mercosur, encallado desde hace años.

Lula da Silva compartió su confianza en que el acuerdo se logre por fin este año aprovechando "la presidencia de España" de la UE en el segundo semestre de 2023.

"Estamos en diálogo para retomar las negociaciones", explicó Da Silva, quien insistió en que este acuerdo "es muy importante para todos".

A su vez, consideró que la presidencia española de la UE "permitirá avances sustantivos" para el acuerdo."Pensaba que sería hecho en mi primer año como presidente en 2003 y luego en 2004 y en 2005. Y no lo fue, espero que podamos hacerlo ahora", manifestó.

Lula enfatizó que su Gobierno quiere "una nueva ola" de inversiones españolas en el país e informó de que el próximo mayo presentarán "un programa" con inversiones clave para cada Estado brasileño.

"Serán oportunidades extraordinarias", aseguró el presidente brasileño, quien reconoció que las infraestructuras siguen siendo "un desafío" para el desarrollo de su país.

En este contexto, compartió su intención de "construir, modernizar y mejorar" carreteras, aeropuertos y autovías, entre otras, e invitó a sector público y privado a darse "la mano".

Además, matizó que Brasil sigue ofreciendo "seguridad jurídica" y está "fortaleciendo los marcos regulatorios necesarios para hacer negocios con toda tranquilidad".

Por otro lado, Lula enfatizó el deseo de que Brasil "vuelva a desempeñar su papel de liderazgo en la agenda climática" y adelantó que serán "implacables" en el "combate a los crímenes ambientales".

Mañana, miércoles, el presidente brasileño será recibido por Sánchez en el Palacio de la Moncloa, la sede del Ejecutivo español, y después almorzará con el rey de España, Felipe VI.