La Coalición Nacional Siria (CNFROS), principal alianza política, afirmó hoy que está dispuesta a colaborar con la comunidad internacional para derrotar al grupo yihadista Estado Islámico (EI). En un comunicado, el presidente de la CNFROS, Hadi Bahra, instó al Congreso de EE. UU. a aprobar "lo antes posible"el plan del presidente estadounidense, Barack Obama, para combatir al EI y permitir el entrenamiento y armamento del Ejército Libre Sirio (ELS).

De esta manera, la coalición reaccionaba al discurso anoche de Obama que anunció que su país atacará al EI en Siria y ampliará su campaña en Irak, con una ofensiva "implacable"para destruir el grupo "dondequiera que esté".

"Perseguiremos a los terroristas que amenazan a nuestro país dondequiera que estén. Eso significa que no dudaré en adoptar acciones contra el EI en Siria. Este es un principio fundamental de mi presidencia: Si amenazas a Estados Unidos, no encontrarás un refugio", dijo Obama en un discurso desde la Casa Blanca.

Bahra recordó que la CNFROS lleva desde hace tiempo pidiendo esta acción y ha advertido en el pasado del "peligro creciente"que suponía la organización extremista.

Recordó que el ELS ha luchado contra el EI y ha expulsado a sus fuerzas de amplias áreas del norte de Siria.

Aun así, subrayó que el ELS necesita apoyo en forma de equipamiento para poder vencer a los yihadistas y actuar "como guardián del pueblo sirio contra el extremismo y la tiranía",

"Hoy estamos un paso más cerca de ese objetivo", indicó Bahra, que consideró que los bombardeos contra el EI en el territorio sirio "pueden ser cruciales"para los esfuerzos internacionales que buscan eliminar el grupo.

Bahra hizo hincapié en que para la CNFROS es igual de importante darse cuenta de que el régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, es "la raíz de la violencia, la brutalidad y el sentido de impunidad que prevalece en Siria".

Destacó que dicho régimen es "una seria amenaza para la estabilidad en la región"porque, aseguró, ha sido él quien ha matado a más de 190.000 personas y ha dejado sin casa a otros 9 millones, con el respaldo de milicias procedentes de Irak y el Líbano.

"Fue el régimen el que alentó que el extremismo y el terrorismo crecieran y causaran devastación en Siria y más allá de sus fronteras", consideró el líder opositor.

El EI proclamó a finales de junio un califato en Irak y Siria, donde ha tomado grandes partes del territorio.