América Latina
Lasso baja la gasolina para frenar las protestas en Ecuador
El Congreso ecuatoriano retoma hoy el proceso de destitución del presidente liberal
“Ecuador debe volver a la normalidad”. El presidente ecuatoriano Guillermo Lasso, aislado por covid, ha anunciado la noche del domingo, “una reducción del precio de la gasolina Extra, Ecopaís y diésel en 10 centavos (9,5 céntimos de euro) por galón (3,7 litros)” mientras la Asamblea Nacional debatía la moción correísta para destituirle y convocar elecciones. El mandatario de 66 años, con jersey burdeos y en aparente buen estado de salud, ha aclarado que “aunque como gobierno tenemos muy claro que este factor no es el que origina los problemas de los ecuatorianos, debemos pensar en el bien común y la paz ciudadana”.
El ministro del Interior de Ecuador, Patricio Carrillo, ha asegurado este lunes que hay “una desescalada de la violencia”. Carrillo ha subrayado que “hoy tenemos 77 carreteras cortadas a nivel nacional y la semana pasada estábamos con un promedio de 350 cierres”. Hasta el domingo a última hora, el director ejecutivo del Banco de Guayaquil de 66 años se había negado a congelar o reducir el precio de la gasolina pese a la presión de las protestas, bloqueos de carreteras y asaltos a centrales energéticas desde la convocatoria de una huelga general indefinida el lunes 13 de junio por la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), apoyada por otros sectores como campesinos, estudiantes, médicos y transportistas.
Los manifestantes se han congregado pasada la 1 de la tarde del lunes en el centro de Quito en los parques El Arbolito y El Ejido, cercanos a la emblemática Casa de la Cultura donde el movimiento de los descendientes de los pueblos originarios descansa y realiza asambleas. “Queremos resultados”, coreaban mientras centenares de personas han comenzado una marcha por el centro de Quito, algunas de ellas portando la bandera de Ecuador.
El presidente de la Conaie, Leónidas Iza, ha asegurado que el fin de semana había servido para “descansar” y “recuperar fuerzas” para desde el lunes “volver a la lucha”. El gobierno estima que de los 20.000 indígenas que llegaron a Quito para protestar, quedan en la capital 4.500 ya que la mayoría ha regresado a sus comunidades. “Serán sustituidos por otros compañeros”, comentaba Iza. La rebaja de 10 centavos deja el precio del diésel en 1,8 dólares estadounidenses, moneda oficial en Ecuador, y la gasolina corriente en 2,45 dólares por galón. La Conaie exige bajarlos a 1,50 y 2,10 dólares respectivamente, aunque valora el segundo gesto de acercamiento de Lasso tras derogar el Estado de excepción decretado es seis provincias.
Tras dos semanas de cortes de vías, movilizaciones pacíficas e intensos enfrentamientos entre policía y manifestantes, la moción de censura correísta para destituirle y convocar elecciones se ha convertido en la gran amenazada para Lasso. La segunda sesión del debate de la moción correísta para destituir a Lasso se ha prolongado siete horas y ha concluido a las 23:20 del domingo en Quito (6:20 de la mañana hora peninsular española). El presidente de la Asamblea Nacional, Virgilio Saquicela, ha convocado la tercera sesión del debate el próximo martes 28 de junio a las 11:00 hora de Quito. El máximo representante del poder legislativo confía que en los próximos días “se pueda instalar una mesa de diálogo”.
Pese a la debilidad de Lasso en el congreso, el correísmo parece que no podrá lograr el voto favorable de dos tercios de la cámara necesarios para destituirle y convocar elecciones presidenciales y legislativas. La coalición fiel al expresidente Rafael Correa (2007-2017), prófugo en Bélgica de la justicia de su país, es el grupo con más representación: 49 de los 137 diputados. Pachakutik, partido del movimiento indígena, suma 27 escaños mientras CREO, la coalición de Lasso, solo cuenta con 12 diputados.
La sesión virtual en la que se discutía la continuidad de Lasso ha estado marcada por las denuncias de legisladores oficialistas y de la Izquierda Democrática de estar recibiendo presiones para que respalden la destitución de Lasso a través de llamadas telefónicas, visitas y manifestaciones con gritos frente a sus casas. La bancada de Pachakutik afronta dividida la votación. El correísmo trabaja para lograr los votos a favor de dos tercios del parlamento para destituir a Lasso y convocar elecciones. Lasso cuenta por ahora con el apoyo de los militares, que cierran filas en torno a su gobierno. “Lasso solo quiere enfrentar con su armamento, solo quiere hacer daño”, lamentó a AFP María Luisa Maldonado, una mujer de 48 años de la localidad norteña de Cayambe.
La Conaie ha abierto corredores humanitarios para permitir que los víveres lleguen a los barrios de Quito, el norte andino y otras zonas bloqueadas por las protestas. Los quince días de movilizaciones han dejado al menos cinco fallecidos, un centenar de detenidos y al menos 200 heridos entre manifestantes y agentes de las fuerzas del orden, según varias organizaciones de derechos humanos. Iza ha explicado que se han dado cuenta de que algunas ciudades se están quedando desabastecidas. El presidente de la Conaie admitía falta de coordinación: “Siempre hemos dicho que se deben garantizar las provisiones, el gas, pero también ya se sale del control, porque muchas veces las bases que están allí protestando no tienen organización. Necesitamos que los compañeros y compañeras en los territorios sepan qué condiciones mínimas se debe garantizar”.
Las protestas, los bloqueos de vías y el cierre de comercios han ocasionado unas pérdidas económicas estimadas de 500 millones de dólares (472 millones de euros). La industria petrolera, el principal productor que exporta Ecuador, está produciendo al 54% de su capacidad, por la toma de pozos petrolíferos y los cortes de carreteras. El ministro de Energía ecuatoriano, José Agusto, ha advertido en un comunicado oficial que, si continúan los bloqueos, los niveles críticos en la producción petrolera ponen al sector en riesgo de paralización total. Ante una disminución de 52.000 barriles diarios, el gobierno informa que las pérdidas estas dos últimas semanas ascienden a 120 millones de dólares. El ministro de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, Julio José Prado, señaló que el sector privado ha dejado de facturar 225 millones de dólares.
El líder indígena de 40 años, cuya figura se popularizó en 2019 en las protestas con el gobierno de Lenin Moreno por la eliminación de los subsidios a los combustibles, mantiene una “guerra por el relato” sobre las machas y la violencia con Guillermo Lasso, como explica a LA RAZÓN el sociólogo de la Universidad SEK de Quito, Nelson Nogales. Las secuelas de la pandemia y la subida de precios de los productos básicos golpean a la población más vulnerable de este país de 17 millones de personas, “aproximadamente un millón de ellas indígenas”, explica el sociólogo la Universidad Pública el Alto, Pablo Mamani. Las políticas liberales de Lasso no han logrado ofrecer soluciones en su primer año de gobierno. Desde la toma de posesión de Lasso en mayo de 2021, el respaldo al presidente ecuatoriano ha ido cayendo. Los ecuatorianos reclaman resolver la violencia del crimen organizado que asesina a diario, la precariedad laboral, la escasez de medicamentos y la corrupción en el sistema público de salud.
Mientras la polarización en Ecuador se incrementa entre quienes acusan de “terrorismo” a los manifestantes y de “represión” al gobierno de Lasso, la periodista ecuatoriana del diario La Hora que cubría las marchas en Quito, Gabriela Verdezoto, explica a este diario que el bloqueo de carreteras ha provocado que la capital ecuatoriana “este aislada y sufra desabastecimiento de gas, frutas y verduras”. La reportera ha cubierto las movilizaciones en Quito: “Hay grupos violentos al margen del movimiento indígena que aprovechan para crear caos”.
Los huelguistas indígenas han levantado bloqueos para que lleguen a la capital, al norte andino y otras zonas frutas y verduras. “Que vengan esa papa, esa leche, cebolla”, confirmaba Iza. Más de 300 organizaciones civiles han reclamado más diálogo entre el gobierno y el movimiento indígena. Iza ha lamentado los desabastecimientos y ha pedido solidaridad “al pueblo ecuatoriano”: “Nuestras familias también sufren la escasez por los cortes de vías”. Las marchas en barrios acomodados del centro y norte de Quito reclaman en los últimos días el fin de la violencia: “Payasos de Correa”, rezaba una de las pancartas en referencia a la moción de censura para destituir a Lasso presentada por el correísmo. El presidente Lasso afronta días decisivos para su continuidad, tanto en la Asamblea Nacional como en las calles, mientras el líder indígena advierte: “Que venga esa lechuga, pero vamos a seguir la lucha”.