El Gobierno de Rusia ha respondido a las sanciones impuestas por la Unión Europea y Estados Unidos y ha decidido sancionar a varias personalidades de alto rango, entre las que se encuentra el presidente de Canadá, Justin Trudeau, y dos ministras canadienses, así como el presidente de Estados Unidos, Joe Biden; su hijo; el secretario de Estado, Antony Blinken, y otros funcionarios de alto rango del país norteamericano.

No obstante, en la Casa Blanca se han tomado con “humor” estas sanciones debido a un error en la lista oficial de sancionados por Rusia. El Kremlin habría apuntado mal el nombre del mandatario estadounidense y ha sancionado a su difunto padre.

El nombre completo del presidente de Estados Unidos es Joseph Robinette Biden Junior, porque su padre se llamaba igual que él, y que ese último apelativo no aparece en la lista de sanciones anunciada por Rusia. La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, recordó esto y bromeó con que Moscú parece haberse equivocado de objetivo al imponer sus restricciones.

“El presidente es un ‘junior’, así que puede que hayan sancionado a su padre. Que descanse en paz”, dijo Psaki en su rueda de prensa diaria.

Por lo demás, la portavoz de Biden, que se encuentra también en la lista de sancionados, minimizó el impacto del anuncio de Moscú. “No le sorprenderá a nadie saber que ninguno de nosotros estamos planeando viajes turísticos a Rusia y ninguno de nosotros tiene cuentas bancarias a las que no vayamos a poder acceder. Así que saldremos adelante”, concluyó la portavoz.