Narcotráfico

Honduras detiene al ex presidente Hernández tras pedir EE UU su extradición

La Justicia estadounidense acusa al ex mandatario de narcotráfico y tráfico de armas

El ex presidente de Honduras Juan Orlando Hernández (JOH), se ha entregado la tarde de este martes ante las decenas de policías hondureños que rodeaban su vivienda en Tegucigalpa desde la madrugada. Su detención responde a la petición de captura y extradición solicitada formalmente por Estados Unidos acusado de tres cargos relacionados con el narcotráfico. El primero de ellos es por “conspiración para importar una sustancia controlada a los EE UU con la intención y el conocimiento de que dicha sustancia sería importada ilegalmente a Estados Unidos”. Las otras dos acusaciones señalan a JOH por “usar o portar armas de fuego o ayudarle a instigar el uso, el porte y la posesión de ametralladoras” y “conspiración para portar armas”.

Ante el acoso de la prensa que se encontraba en el lugar, Hernández ha abandonado su domicilio esposado, escoltado por una decena de policías hondureños, con chaleco antibalas luciendo una gorra, gafas de sol y una mascarilla azul. El ex mandatario que gobernó el país durante ocho años bajo la continua sospecha de corrupción y vínculos con el narcotráfico, se ha mostrado dispuesto a colaborar con la Justicia para facilitar el proceso.

Hernández se ha subido a un furgón policial dos semanas después de abandonar la Presidencia que ocupó desde 2014 hasta la toma de posesión deXiomara Castro el pasado 27 de enero. Castro se convirtió en la primera mujer en presidir Honduras derrotando en las urnas al desgastado Partido Nacional de Hernández.

Hernández deberá comparecer ahora ante un juez hondureño que decidirá sobre la petición de extradición solicitado por Washington. Poco después de trascender la noticia, Hernández difundió un audio en redes sociales reconociendo que “no es un momento fácil, a nadie se lo deseo” y advirtiendo que estaba dispuesto a “presentarme voluntariamente y defenderme de acuerdo a la ley”.

Tras abandonar la Presidencia, Hernández consiguió un puesto como diputado en el Parlamento Centroamericano, pero la inmunidad del cargo no ha sido suficiente para impedir la actuación de la justicia hondureña. EE UU había retirado la visa del expresidente hondureño yAnthony Blinken, jefe de la diplomacia estadounidense, escribió recientemente en Twitter: “Estados Unidos está promoviendo la transparencia y la rendición de cuentas en Centroamérica al hacer públicas las restricciones de visa contra el ex presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, debido a acciones corruptas”.

Las sospechas sobre los vínculos del ex presidente con el narcotráfico quedaron expuestas durante el juicio que su hermano y ex diputado ‘Tony’ Hernández enfrentó en una corte de Nueva York. ‘Tony’ Hernández fue condenado a cadena perpetua por introducir cocaína y otras sustancias ilegales a Estados Unidos. El nombre de “Juan Orlando” fue citado más de cien veces por testigos en el juicio de su hermano.

La prensa hondureña apunta que Hernández deberá responder por al menos cuatro delitos, entre ellos coordinar el envío de 185 toneladas de cocaína desde Venezuela y Colombia a Honduras. A cambio, el ex presidente recibió supuestamente grandes cantidades de dinero de los carteles del narcotráfico que utilizó con fines políticos.

Se prevé que el ex presidente hondureño sea extraditado en los próximos días. Ante esta perspectiva, se había especulado con la posibilidad de que Hernández abandonara el país y buscara refugio en la Nicaragua autoritaria del ex guerrillero sandinista Daniel Ortega. Hernández fue uno de los pocos líderes internacionales que acudió a la toma de posesión del autócrata nicaragüense el pasado 10 de enero.

Antes de su detención, su abogado, Hermes Ramírez, confirmó que JOH se encontraba en territorio hondureño “tranquilamente en su casa esperando el resultado de estas diligencias”. Según ha desvelado el abogado hondureño Marlon Duarte, Honduras jamás ha rechazado una petición de extradición de EE UU. El caso de Hernández sienta un precedente por tratarse de un ex presidente del país con muchos apoyos políticos y judiciales, como los actuales magistrados de la Corte Suprema que fueron nombrados por Hernández.

Se prevé que sea extraditado en los próximos días o semanas. Por ello, el abogado, que se presentó la semana pasada a la Corte Suprema de Justicia para solicitar información sobre posibles procesos judiciales que hubiera en contra del ex presidente, calificó de “atropello” la gran presencia policial y militar en los alrededores de su casa. Ese día, el letrado remarcó que la voluntad de Hernández no es otra que “limpiar su nombre debido a los múltiples ataques que ha recibido estos años”.

El Departamento de Estado justificó esta decisión basándose en “múltiples informes creíbles de los medios” que apuntan a que Juan Orlando Hernández, quien gobernó Honduras entre el 27 de enero del 2014 y el 27 de enero de este año, “se ha involucrado en una corrupción significativa al cometer o facilitar actos de corrupción y narcotráfico y al utilizar las ganancias de actividades ilícitas para facilitar campañas políticas”.