Salud mental
Esto dice la numerología sobre tus 'traumas de la infancia' y cómo sanarlos
Esta disciplina del conocimiento tiene mucho que decir de los problemas vividos cuando niños que nos dejaron huella
En este mundo terrenal, pareciese que la única manera válida de aprender algo es 'a palos', a base de ensayo y error. Equivocándonos, cayendo, recomponiéndonos y volviéndonos a levantar de nuevo; así una, y otra, y otra vez. Sin embargo, durante el proceso de aprendizaje personal de cada uno, a veces algunos obstáculos o problemas nos dejan marcada el alma, como una cicatriz en la piel.
Para responder a todas las incógnitas y debates internos que todas las personas viven consigo mismas y los problemas que tuvieron que enfrentar en su infancia, la época más lejana mentalmente y con menor preparación, llega la numerología a intentar dar respuestas que ayuden a aclarar conceptos y sanar heridas para quienes no se encuentran del todo en paz con su pasado.
La numerología es una disciplina que estudia el significado de los números y su influencia en la vida de las personas. Según esta práctica, cada número tiene una vibración y energía específica que puede afectar diversos aspectos de nuestra existencia.El número de portal en el que vivimos o nuestra fecha de nacimiento no son una excepción; se cree que estas cifras puede revelar información valiosa sobre nuestra personalidad, destino y propósito en la vida. A través de la numerología, es posible desentrañar los misterios que rodean el año de nacimiento y comprender mejor cómo influye en nuestro camino.
¿Qué es la numerología?
Esta escuela, a través de sus diferentes disciplinas, busca establecer una conexión entre la magia y la matemática, entre el mundo espiritual y la parte más calculadora y objetiva de la mente humana. También tiene algunas ramas que se centran más utilizar las matemáticas como una 'mancia' o ciencia de la adivinación, es decir, para predecir sucesos futuros a través del cálculo y la simbología oculta detrás de cada número.
A lo largo de la historia de la humanidad, diferentes culturas alrededor de todo el mundo han coincidido en el culto a las matemáticas y su uso para predecir sucesos futuros, ya sean los pueblos mayas, hindúes o árabes. En Europa, sin embargo, no se volvió a hablar tanto de la numerología hasta que L. Dow Balliett, un gran pensador espiritualista, se interesó por ella y escribió varios libros acerca del tema en el siglo XX.
¿Qué dice la numerología acerca de los traumas de la infancia?
Lo primero que debemos hacer si queremos sanar alguna herida que nos haya podido quedar de cuando éramos pequeños es, por supuesto, identificarla. Para ello, habremos de sumar los números de nuestra fecha de nacimiento, hasta que quede una cifra de un solo dígito. Por ejemplo, si naciste el 18 de agosto, habría que sumar 1+8 + Agosto (que es el mes 8). Es decir, 9 + 8, que da 17; y si para acabar sumamos 1 + 7, obtenemos el número final: en este caso, el 8.
La 'influencer' en materia de disciplinas alternativas y de adivinación Dani García (@holisticbydani) compartió en un vídeo reciente los significados que ella interpretaba en base a la experiencia, reduciendo la vibración de cada número a un posible 'trauma infantil'.
Número 1: El trauma del 'lobo solitario'
Esta clase de niños son muy individualistas, y tratan de afrontar todo por su cuenta. Con el tiempo, no son capaces de pedir ayuda a los demás, ya sea por orgullo, por vergüenza o por falta de costumbre. Esta clase de personalidades busca ser el mejor en todo, y suelen sentir que nunca tuvieron la valoración que creían merecer.
Número 2: El trauma de los 'vínculos sanos'
Estos niños solían tener problemas a la hora de socializar con el resto del mundo, especialmente con personas de su misma edad. Suelen acabar desarrollando una falta de apego a sus familiares o amigos, sienten que no encajan con nadie.
Número 3: El trauma de la 'oveja conducida'
Las infancias de estos niños estuvieron marcadas por el designio férreo de sus padres, que los apuntaban a actividades extraescolares en contra de su voluntad, sin tener en cuenta su opinión. Acaban por desarrollar conductas negativas para ellos mismos, como ceder siempre a las opiniones de los demás para no causar ninguna incomodidad.
Número 4: El trauma del 'adulto temprano'
Se suele ver en niños a los que se les cargó con responsabilidades excesivas desde muy pequeños, para muchas de las cuales no estaban preparados. Cuando llegan a cierta edad, estas personas suelen tratar de hacer lo opuesto, huyendo de las obligaciones y siendo más inmaduros de lo que les correspondería.
Número 5: El trauma del 'suelo sin cimientos'
Estas infancias se ven marcadas por ir un continuo deambular, sin un lugar fijo en el que quedarse ni unas personas hacia las que poder sentir apego antes de que desapareciesen. Esta clase de personalidad suele desarrollar un miedo a los vínculos fuertes de mayor.
Número 6: El trauma del 'Balón de Oro'
Los niños con esta clase de problemas vivieron de pequeños tratando de hacer algo siempre por los demás, pero nunca se les reconoció el mérito. Cuando se hacen mayores, pueden seguir dos tendencias totalmente opuestas; o bien son demasiado atentos o agobiantes con sus seres queridos, o bien se vuelven frívolos y no miran más que por su propio bienestar.
Número 7: El trauma de la 'obediencia ciega'
Se da cuando un niño ha sido sometido a normas demasiado estrictas para su edad, y acaba buscando acatar todas las reglas a la perfección y cumplir con 'todo aquello que se supone que tiene que hacer' para contentar a sus padres o seres queridos. Esta personalidad vive reprimida y busca la aceptación en su severidad.
Número 8: El trauma del 'apoyo nulo'
Una infancia caracterizada por la ausencia total de ayuda o respaldo por parte de sus seres queridos, que no mostraban disposición ni interés hacia ninguno de los logros o gustos del niño. Estas personas acaban siendo extremadamente inseguras de sí mismas en todo lo que hacen, y nunca se sienten a gusto con sus decisiones.
Número 9: El trauma de la 'pérdida temprana'
Estos niños sufrieron mucho de pequeños debido a que un ser querido falleció o desapareció de sus vidas. Crecen generando resentimiento porque no supieron canalizar todo su malestar y ni eran capaces de gestionarlo con la poca madurez con la que contaban en ese momento. En algunas ocasiones, esto llevó a que fuesen sobreprotegidos y acabaran siendo personas dependientes.
NOTA:Este artículo sobre la numerología se proporciona únicamente con fines de entretenimiento. La numerología no es una ciencia exacta y las predicciones deben tomarse como orientativas. Cada individuo es único y su vida puede no ajustarse a las descripciones generales proporcionadas.
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