El entrenador del Tottenham Hotspur, Harry Redknapp, planea introducir una normativa para prohibir la próxima temporada el consumo de alcohol en la plantilla "spur"a raíz de la detención del capitán del equipo, Ledley King, por su supuesta agresión a otro hombre en Londres. El defensa internacional fue arrestado e interrogado el pasado fin de semana bajo sospecha de haber atacado a un hombre al lado de una discoteca del barrio de Soho, en el centro de la capital británica. El propio jugador expresó públicamente, mediante un comunicado oficial en la web de ese club, su "profundo arrepentimiento"por lo sucedido. Ahora parece que el "míster"del equipo inglés, que anteriormente entrenó el español Juande Ramos, piensa tomar cartas en el asunto para evitar que episodios así vuelvan a repetirse, según declaró Redknapp al tabloide británico "The Sun". "La próxima temporada implantaré una norma estricta para que en este club se prohíba la bebida. Los futbolistas deberían dedicar su vida a jugar", explica el entrenador a este rotativo. Redknapp argumenta que los futbolistas "no deberían beber"al igual que "no se debe poner diesel en un ferrari". "Sé que suena duro pero hablamos de gente que gana muchísimo dinero y que constituyen ejemplos para niños", subraya. Tras el incidente en el que participó King, el defensa fue puesto en libertad bajo fianza hasta mediados de julio cuando se reanudarán las pesquisas por lo sucedido. El entrenador sostiene que este tipo de problemas no se darían "si los jugadores no bebieran". "En el fútbol inglés existe todavía mucha cultura del alcohol aunque no es tan malo como lo ha sido y en el Tottenham llevamos a cabo muchas actividades en las que participan niños, con lo que debemos constituir un ejemplo", señala Redknapp.