Las fuertes tormentas causan tres muertes en la Comunidad

MURCIA- Las precipitaciones con las que amaneció ayer la Región no pronosticaban la dramática noticia con la que terminó el día. Las lluvias torrenciales dejaron sin vida a tres personas: un vecino y una menor de la pedanía lumbrerense de El Esparragal, que fueron rescatados sin vida del interior de dos vehículos, y un hombre en Sangonera la Verde cuando intentaba cruzar con su turismo la rambla de El Reguerón. La niña fallecida, de nueve años, viajaba en compañía de otras dos personas que, por suerte, sí que pudieron salvar sus vidas. Las fuertes lluvias también dejaron desaparecida a una mujer de mediana edad que, presumiblemente, podría haber sido arrastrada por la fuerza del agua, según informó la Delegación del Gobierno.

En Cartagena, las personas que se encontraban en el camping Cartagonova y viviendas adyacentes fueron desalojadas ante el riesgo de desbordamiento de la rambla de El Albujón. Por su parte, en el municipio de Puerto Lumbreras, uno de los más castigados por el temporal, también tuvieron que ser trasladados los vecinos de los inmuebles próximos a la rambla de Nogalte. En Lorca, los propietarios de las viviendas ubicadas en las calles Horno y Santa Quiteria tuvieron que marcharse de sus hogares, ayer por la tarde, como medida preventiva por la abundante tromba de agua, así el Ayuntamiento lorquino ofreció alojamiento a una veintena de los afectados que pasaron la noche en un hotel. Y es que, los dos municipios murcianos registraron de media, 140 litros por metro cuadrado.

A medida que avanzó el día, la Comunidad activó el nivel 2 de alerta del Plan Especial de Protección Civil solicitado por la Dirección General de Emergencias, lo que conllevó que la Unidad Militar de Emergencias (UME) se trasladara a Puerto Lumbreras con un dispositivo formado por 53 efectivos y 21 vehículos, aunque instaló el centro de operaciones en la ciudad de Lorca.

En la comarca del Guadalentín se desprendieron dos puentes. El primero de ellos fue en la autovía A7 cuando los pilares de un puente ubicado sobre una rambla, entre Lorca y Puerto Lumbreras , se vinieron abajo provocando un socavón en la infraestructura. A raíz del corte de tráfico tras el derrumbe, se cerró la vía en ambos sentidos en el kilómetro 583 que presentaba nivel rojo por riesgo de inundación y se establecieron desvíos por la A91, en sentido Almería, y por la AP7 en Vera (Almería), en sentido Barcelona. Ésta última, la autopista Cartagena-Vera se convirtió en la vía alternativa, sin pago, para los usuarios que pasaban desde Murcia a Andalucía, o viceversa. Sin embargo, en ella se produjo el segundo desprendimiento de un puente sobre la calzada a las 16:20 sin causar daños personales, a la altura del punto kilométrico 892. El derrumbe del segundo puente cerró la conexión por carretera entre las dos comunidades limítrofes durante unas horas.

El Teléfono Único de Emergencia 112 Región de Murcia, recibió entre las 12:00 horas del mediodía y las 20:45, un total de 1.025 llamadas relacionadas con las dificultades derivadas de la jornada de ayer. Las llamadas supusieron la gestión de 881 asuntos, de los que 324 fueron achiques de agua, 156 respondieron a la solicitud de salvamento y rescate de personas y el resto fueron a consecuencia de la caída de objetos a la vía pública, pequeños derrumbes, entre otros.

El presidente del Gobierno regional, Ramón Luis Valcárcel, así como y el consejero de Presidencia, Manuel Campos, se desplazaron al municipio de Puerto Lumbreras para comprobar in situ la situación de las zonas más afectadas por las precipitaciones.
La fuerte tormenta de gota fría, además de causar desperfectos en algunas viviendas, muros e instalaciones en distintos municipios, no hizo honor a las ansias del pueblo murciano de reportar beneficios, sino que la atronadora tromba de agua se ha llevado la vida de tres personas.