París- La cultura de la bicicleta como medio de transporte público desembarca en Valencia el lunes con un dispositivo de 500 bicis repartidas en cuarenta estaciones a lo largo de la fachada marítima y siguiendo el cauce del río. La capital valenciana se suma así a la experiencia de Sevilla o Barcelona que cuentan desde hace años con la posibilidad de alquiler. El sistema de Valenbisi es sencillo y económico. Los usuarios tienen dos posibilidades, un abono anual por 18 euros o la alternativa semanal por diez. En ambos casos, la primera media hora de uso será gratuita, mientras que la segunda costará cincuenta céntimos y un euro a partir de la segunda hora. El objetivo es que exista una rotación constante y que siempre existan bicis disponibles, a lo que se compromete la empresa que gestiona el sistema, la francesa JCDecaux. «La atención al servicio durante los primeros meses es fundamental», explicaba ayer su directora general en España, Isabel López. Por ello mimarán la disponibilidad de vehículos y puestos de anclaje libres para estacionar. Asumen riesgos como el vandalismo, pero confían en que sean los propios usuarios los que las cuiden.Las ventajas, aseguran, son infinitas. Según explicó López, en las ciudades en las que ya están implantados se ha comprobado un aumento de las ventas de bicis. Asimismo, se constata un descenso de la velocidad de los coches y, como plus, la reducción de emisiones de CO2, hasta 700.000 toneladas menos cada año.Y no le cuesta nada a las arcas municipales, ya que los doce millones de euros que vale la iniciativa se sufragarán a través de los espacios publicitarios que la multinacional gestiona en el mobiliario urbano de la capital valenciana. El concejal de Circulación y Transporte, Alfonso Novo, visitó ayer París junto a López para mostrar a la prensa el funcionamiento del sistema que los parisinos han adoptado con absoluta normalidad. Visto lo visto, «en Valencia tendrá una gran acogida. Será un éxito», vaticinó Novo.