VALENCIA- El juez instructor del caso Emarsa reclamó ayer al exgerente de la depuradora, Esteban Cuesta, que justifique el destino de 140.000 euros obtenidos de la venta de una vivienda cuando ya se habían abierto diligencias contra él por el caso de la depuradora.
Además, declaró por tercera vez debido a su imputación en el caso, el exconcejal del PP y exdirector de calidad de Emarsa, Juan Carlos Gimeno.
Este afirmó que Sebastián García «Chanín», exjefe de informática de la depuradora de Pinedo y también imputado, pagó comidas del Partido Popular y contó con el apoyo de Silvestre Senent, edil y presidente local del partido.
En su declaración, manifestó que era el Ayuntamiento de Valencia y su vicealcalde, Alfonso Grau, los que controlaban la depuradora de Pinedo .
Gimeno reiteró en todo momento que considera «absolutamente imposible que nadie, desde la responsabilidad política, supiese qué es lo que pasaba en Emarsa, cuando el personal que entraba y determinados proveedores que trabajaban en el Ayuntamiento, la Diputación y Emarsa iban con todas las bendiciones».
El concejal de Relaciones con los Medios de Comunicación, Miquel Domínguez, calificó de «calumnosas, falaces y vergonzosas» las acusaciones respecto a la gestión por parte del ayuntamiento de Valencia del caso Emarsa.
Juan Carlos Gimeno aseguró que la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, recibió «tres o cuatro» bolsos comprados con dinero proveniente de la depuradora de Pinedo.