Según fuentes del complejo, estos pequeños primates se encuentran "en perfecto estado de salud"y, gracias al cuidado de sus madres, han duplicado su peso cuando sólo han transcurrido pocos días desde su alumbramiento.

Las tres progenitoras, primerizas en maternidad, amamantan puntualmente a sus bebés e, incluso, se turnan para comer con la intención de no dejar solas a las crías.

Los Lemures Vari son una familia de primates acostumbrados a la socialización y, por ello, todos los ejemplares que conviven en la instalación ayudan a las madres en el cuidado de las crías.
Su dieta se basa en frutas, verduras y semillas, y ha sido reforzada tras el alumbramiento, al igual que la cantidad de vitaminas.

El parque tiene acondicionada la instalación según las necesidades de estos animales, los cuales se encuentran en peligro de extinción debido a la deforestación que afecta a la Isla de Madagascar desde hace años.

Además, el personal veterinario y los cuidadores de Mundomar realizan exhaustivos controles diarios tanto de las crías como de las madres para garantizar la buena evolución de los recién nacidos.