El presidente del gobierno español Mariano Rajoy marcó en rojo en su agenda de la cumbre de la OTAN en Chicago un encuentro con la canciller Ángela Merkel, solicitado por la alemana.
Del mismo, sorprendió sobre todo el lugar en el que Merkel le propuso encontrarse a Mariano Rajoy. La alemana quiso dar paseo en barco por el río Chicago hasta el lago Michigan en una de las embarcaciones que generalmente cogen los turistas para disfrutar de la famosa arquitectura de la ciudad.

La reunión en el barco, que se prolongó durante aproximadamente una hora, se convocó después del alarmante incremento de la prima de riesgo de la deuda pública española.

Después del paseo el presidente del gobierno español, que no aceptó preguntas de los periodistas españoles acreditados ante la OTAN, indicó que "le he explicado mi posición y la política económica de España y la apuesta por el control del déficit publico. Vamos a seguir haciendo un esfuerzo para que las administraciones públicas no gasten más de lo que ingresen. He manifestado mi posición favorable a todas las reformas estructurales de los países de la Unión Europea. Vamos a continuar (con las nuestras). Son muy importantes para nuestro país porque si somos competitivos, podremos vender fuera y después crear empleo", explicó el presidente Rajoy después de su paseo con Angela Merkel.

En referencia al tira y afloja entre Barack Obama y Angela Merkel en el G-8, Rajoy que no quiso citar a ninguno de los dos políticos por su nombre recordó que "creo que el debate que se plantea entre austeridad y crecimiento no tiene ningún sentido", ya que a su juicio son complementarios.

"La señora Merkel ha reiterado en privado que apoya las reformas de nuestro país y de forma muy particular el ejercicio de transparencia que España está haciendo con sus entidades financieras, que sería muy positivo que se hiciera en otros países de la Unión Europea. El lunes se elegirán las dos casas de auditorías que precederán a ejercer este ejercicio", indicó Rajoy.

El presidente anunció que "hemos hablado de una conferencia de inversores que tendrá lugar en España el próximo 6 de septiembre con la señora Merkel y un grupo de alemanes que tienen interés en nuestro país. Tenemos que tener en España emprendedores granes, pequeños y medianos. Pero, también inversores (extranjeros) que vengan nuestro país", reconoció Mariano Rajoy.

"Y por último le transmití las muchas cosas que hay que hacer en Europa. Primero hay que superar la crisis, y (también) debemos seguir avanzando en un proceso de integración política y fiscal. España sigue apoyando este proceso de integración europea y por supuesto el euro.

Me reuniré en París con el señor Hollande. Tenemos que hacer las cosas en nuestro país, pero también queremos tener una participación muy activa en lo que es la construcción de la Unión Europa", explicó el presidente en una declaración que no estaba prevista en un principio.

Rajoy se desplazó el pasado sábado a Chicago con la mala noticia de la nueva revisión del déficit público español de 2011, que ha pasado del 8,5 por ciento del PIB al 8,9 tras conocerse las desviaciones al alza del déficit de Madrid, la Comunidad Valenciana, Andalucía y Castilla y León.

Tras el paseo con Merkel, Rajoy se dirigió al centro de convenciones McCormick Place, donde se encontró con los periodistas, con la delegación española para asistir a los actos oficiales de la cumbre de la OTAN. Allí, fue recibido por el presidente estadounidense, Barack Obama, y el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen.

Por la noche tuvo lugar una cena de trabajo ofrecida el jefe de la Alianza, mientras mañana lunes el presidente del gobierno participará en la reunión de los países participantes en la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad en Afganistán.