Cambio en la «Complu»

MADRID- Quedan tres días para que la Complutense celebre sus elecciones a rector. Lejos de convertirse en un asunto estrictamente universitario que atañe a docentes, personal y alumnado, la UCM vive los comicios más polémicos de su historia ya que los últimos acontecimientos han estado en boca de todos. La profanación de la capilla del campus de Somosaguas el pasado 10 de marzo, que se saldó con cuatro estudiantes-activistas detenidos, desató un debate a nivel nacional sobre el respeto a la libertad de culto. Se prodigaron manifestaciones a favor y en contra de las capillas en los centros universitarios e incluso en apoyo a los detenidos –la última, ayer, a las 12:00 del mediodía en la plaza de Ópera, por un grupo de feministas que amparaban la acción de las jóvenes que mostraron sus pechos en la capilla–. Pero también han empañado el juego limpio los continuos rumores de «pucherazo» por parte del actual rectorado, y en concreto, de su vicerrector y candidato oficial, Carlos Andradas.

La «cacicada», según los más críticos, consiste en impedir que el personal de los centros de la universidad que están fuera de su campus puedan votar en su propio centro y tengan que desplazarse al rectorado para hacerlo. Toda esta polémica, añadida a la pésima gestión que viene realizando Berzosa desde 2003, que ha sumido a la universidad en una deuda que se estima en 150 millones euros, ha originado el rechazo generalizado al actual equipo. Andradas, por tanto, juega en desventaja al pertenecer al mismo, y el profesor José Iturmendi, ex decano de la Facultad de Derecho durante 20 años, ha ganado adeptos a medida que se aproxima el día clave. Iturmendi es el único candidato que ha hablado claro estos días a favor de las capillas y lleva años cuestionando el oscurantismo de la gestión de Berzosa. A pesar de que hay seis candidatos, las encuestas apuntan a que el enfrentamiento final será entre ellos dos, con proyectos totalmente contrapuestos. La suerte ya está echada.