Comunidad de Madrid

Tres corrientes y un objetivo

Las primarias, su reto al aparato federal y, sobre todo, sus consecuencias posteriores, no han tardado en pasar factura a Tomás Gómez.

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Aunque hace sólo unos días el secretario general del PSM se veía como nuevo presidente de la Comunidad de Madrid, lo cierto es que apenas 48 horas después del descalabro de los socialistas en las elecciones ya hay quien pide paso. Aún sin caras visibles, tres son las corrientes en las que se estaría dividiendo la militancia del PSOE madrileño en busca de un cambio. Los primeros en dar un paso adelante fueron los simanquistas, con el diputado César Giner al frente, que el lunes comenzaron a mover por las agrupaciones del partido un manifiesto en el que, entre otras cosas, solicitan a su Ejecutiva regional transparencia, cercanía a la sociedad y la puesta en marcha de «cambios inevitables». Esta corriente pide la celebración de un congreso extraordinario (en el que se podría pactar o promover la salida de Tomás Gómez de la secretaría general) de forma inmediata. «En cuanto el documento esté trabajado estaremos listos para acudir a un congreso que seguro será competido», declaró ayer Giner. Los coletazos de la batalla en primarias entre Trinidad Jiménez y el líder del PSM todavía no han cesado y, por eso, son muchos los que ya apuntan al equipo más cercano a «Trini» como otra de las corrientes que podría disputarse el despacho del líder regional.

Lideradas bien por el secretario de política municipal del PSOE, Antonio Hernando, o por el diputado Pedro Sánchez, esta corriente muy cercana al secretario de Organización, José Blanco, también está, según ha podido saber LA RAZÓN, tratando de consolidarse en la Comunidad. Eso sí, prefieren alargar los plazos y que los cambios en Madrid se pongan en marcha cuando las aguas ya corran calmadas en Ferraz. Entre sus integrantes estarían algunos pesos pesados de la federación defenestrados tras proclamarse la candidatura del ex alcalde de Parla, como los concejales David Lucas o Ángeles Álvarez, o el por ahora diputado regional Adolfo Navarro. Ayer, preguntado por este movimiento, Lucas, cabeza de cartel de los socialistas en Móstoles, negó su participación en el mismo y recordó que el lunes, en la última Ejecutiva regional del PSM, él se manifestó «en sentido de unidad». El tercer trozo del pastel del PSM lo integran el actual secretario general y algunos de sus hombres fuertes como Enrique Cascallana o Juan Barranco, aunque hay quien quiere ver una nueva escisión de los socialistas de entre sus actuales y más cercanos colaboradores. El ex líder del PSM Rafael Simancas se refiriró en declaraciones a Onda Cero a que «es el secretario general quien debe tomar buena nota de lo que los ciudadanos han planteado. Nos quedan diez meses y no vamos a perder ni un solo día». Diez meses, ni un día más ni un día menos, y eso que la Legislatura apenas ha echado a andar. Veremos.

IU le da calabazas a Gómez
El pacto a la desesperada que el líder del PSM lanzó el lunes por la tarde a IU para mantener el gobierno en los muchos municipios en los que los socialistas han sido derrotados ha tenido un brevísimo recorrido. Ayer mismo, el coordinador general de IU-CM, Gregorio Gordo le dejó bien claro que «las circunstancias políticas actuales no aconsejan que IU alcance acuerdo global alguno» con el Partido Socialista de Madrid.