El PSdeG presiona al alcalde de Orense para que dimita tras ser imputado

MADRID- La decisión de la jueza Pilar de Lara Cifuentes de imputar al alcalde socialista de Orense, Francisco Rodríguez, podría tener consecuencias políticas en forma de dimisión. Y no sólo porque los grupos de la oposición vayan a exigir responsabilidades, sino porque desde las propias filas del PSdeG se espera que abandone lo antes posible. Tanto es así, que el número de la formación regional y senador, Pablo García, estuvo el sábado en Lugo esperando a que Rodríguez saliera de prisión con la intención de pedirle que dimitiera esa misma noche.

Y es que las elecciones gallegas están a la vuelta de la esquina y al PSOE gallego la detención y posterior imputación del regidor de la tercera ciudad más importante de Galicia le han pillado con el pie cambiado. Ayer, el cabeza de lista socialista en la provincia de Pontevedra, Abel Losada, aseguró que su formación «analizará la situación», y quiso trasladar a la ciudadanía que el PSdeG «estará a la altura de las circunstancias», manifestaciones que dejan entrever que Rodríguez será apartado, al menos de forma temporal, de la escena política. A los motivos electorales habría que sumar el ya conocido enfrentamiento interno entre el alcalde y el candidato del PSdeG a la Presidencia de la Xunta, Pachi Vázquez. Ambos de Orense, sus disputas en el partido vienen de lejos. Vázquez habría encontrado ahora la oportunidad perfecta para apartar definitivamente a Francisco Rodríguez del partido.

De momento, el alcalde agradeció ayer a través de su cuenta de Twitter el «apoyo, cariño y confianza» recibidos tras pasar más de 70 horas detenido en el marco de la «operación Pokemon». Posteriormente convocó de forma urgente a la prensa y anunció que no contempla dimitir, tras declararse «inocente de todos los cargos» que se le imputan. Su comparecencia generó una gran expectación, puesto que supuso su retorno al consistorio un día después de prestar declaración en calidad de imputado. En presencia de gran parte de los cargos locales del PSOE, el alcalde socialista se declaró «inocente» de todas las causas que le imputan, y añadió que descarta dimitir porque se siente y se considera «inocente de todo».
En todo caso, reconoció que a partir de hoy «se pueden dar otras circunstancias», por lo que se comprometió a garantizar «la gobernabilidad del Ayuntamiento de Orense».

Su marcha volvió a exigirla ayer su socio de Gobierno, el BNG, que a través de un comunicado insistió en que espera que el regidor «materialice su renuncia con la mayor brevedad posible».
El PP, por su parte, mostró más precaución, puesto que «esperará a conocer las particularidades del caso, a ver de qué se le acusa, a conocer los hechos, y a partir de ahí tomar las decisiones oportunas», aseguraron a este diario fuentes populares, al mismo tiempo que anuncian la apertura de un «expediente informativo» a Adolfo Gacio, alcalde de Boqueixón, también imputado en este caso.