Daniel Sancho tiene serios problemas con la justicia, pero no solo en Tailandia, donde está ya en prisión preventiva tras el asesinato por degollamiento y posterior descuartizamiento del cirujano Edwin Arrieta. El hijo de Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo arrastra problemas judiciales desde hacía años, como mínimo cuatro, porque fue acusado de un grave delito de lesiones en 2019 en Madrid, concretamente en la calle Alberto Aguilera. Un incidente por el que tendrá que responder ante la justicia española, aunque al estar en una prisión tailandesa deberá declarar vía telemática ante el juez.

Pero no es la primera vez que Daniel Sancho tiene problemas en Madrid y termina llegando a las manos, supuestamente, para solucionar sus diferencias. Así sucedió también en 2017, cuando se encontraba a las puertas de una famosa discoteca en la Avenida Alberto Alcocer de la capital patria. El joven que se ha presentado como presunto agredido por el chef, Richard William Medina, ha contado su versión de los hechos a Ana Rosa Quintana para el programa ‘TardeAR’. Un muchacho que asegura que Daniel Sancho le agredió tanto a él como a su amigo, propinándoles una paliza, mientras les increpaba con comentarios racistas.

“Nos estuvo increpando, insultando, le dio un manotazo a mi amigo que tenía un vaso de sidra en la mano y le rompió dos dientes”, asegura el joven que ha hablado en la tarde de este martes desde el programa de las tardes de Telecinco. Según su testimonio, la pelea continuó fuera de la discoteca, ya en la calle: “Ya fuera, mi amigo fue a reclamarle a Daniel Sancho y él se le tiró encima, le propinó golpes y patadas. Yo fue a separarles y me dio un puñetazo. Me rompió la nariz y el metacarpiano de la mano. Apareció la policía con el Samur”, relata lo sucedido hace ahora seis años atrás en una trifulca nocturna.

Tal y como ha podido confirmar Manu Marlasca, mano derecha de Ana Rosa Quintana en la mesa de sucesos, ambos jóvenes denunciaron a Daniel Sancho por esta presunta agresión. La fiscalía pidió para él dos años de prisión acusado de un delito de lesiones graves, con el agravante de haber utilizado un vaso de cristal para cometer la agresión. También tuvo que indemnizar a estas dos personas, a las que profirió durísimos insultos: “Esta persona yo pienso que iba borracha o drogada. Iba como muy pesado. Se le notaba agresivo. Me decía negro de mierda y que qué hacía aquí. Se pensaría que es el rey del mundo. Soy una persona de color, algo de racismo tendrá en lo que es su conciencia”, sentencia el joven en directo.