Ausencias
Joe Biden: los apacibles fines de semana de un "anciano con mala memoria"
El presidente estadounidense se ausenta de la Casa Blanca con más frecuencia que cualquiera de sus antecesores
No es la fatiga de los 81 años lo que conduce a Joe Biden a Delaware un fin de semana sí y otro no, sino el hábito. Desde que llegó a la Casa Blanca, ha pasado una buena parte de su tiempo en este pequeño estado ubicado en una península con playas y dunas. Allí su padre amasó una discreta fortuna como vendedor de coches y, desde entonces, algunos de los episodios más significativos de la biografía del presidente le sitúan en Delaware.
Actualmente dispone de dos residencias en este estado. Una en Rehoboth Beach, que es donde se le vio el pasado fin de semana, y otra en Wilmington. Es una costumbre muy común en los presidentes de Estados Unidos. Donald Trump también pasaba parte de su tiempo fuera de la Casa Blanca. Solía desplazarse a sus hogares de Florida y Nueva Jersey. En total, se ausentó 291 días. George W. Bush acumuló 408 días fuera de Washington en sus primeros tres años de mandato. Barack Obama, que debía de sentirse más feliz en la Casa Blanca, no pasó de los 135.
Joe Biden hace ahora el camino inverso al de su juventud, cuando regresaba en tren cada noche a su casa de Wilmington. Según una investigación de CBS News, teniendo en cuenta las estancias en Camp David, los viajes al extranjero y las vacaciones, Biden ha pasado todo o parte de 408 días fuera de la Casa Blanca desde que asumió la presidencia. Son desplazamientos que difícilmente pasan inadvertidos, dado el operativo que exigen cada vez que se mueve: aviones helicópteros, personal y documentos ultrasecretos. Según esta misma investigación, a veces ni siquiera el personal de Biden en la Casa Blanca sabe dónde pasará el fin de semana. No es una cuestión de improvisación, sino de seguridad.
"El presidente ha viajado a Delaware durante décadas, y pasar tiempo los fines de semana con su familia y en su comunidad sigue siendo una parte importante de su vida", desveló la Casa Blanca en un comunicado. Y para evitar comentarios, añadió: "Como saben quienes le rodean, el presidente también trabaja constantemente sin importar dónde esté: ya sea en la Casa Blanca, en Delaware o viajando por el país".
Su día a día, propio de un octogenario
Se sabe también que Biden es madrugador, aunque la mayoría de los eventos y sesiones informativas se colocan en su agenda pública en las primeras horas de la tarde, generalmente después de un almuerzo ligero, con sopa y ensalada.
La mañana la aprovecha para hacer ejercicio con un entrenador, pedalear y caminar hasta el Despacho Oval. Cena junto a su esposa, Jill, hacia las 19,00 h. y a partir de esa hora dedica un tiempo a conversar con sus nietos por teléfono. Su vida cotidiana es cada vez más parecida a la de cualquier ciudadano octogenario que a la de quien ostenta el poder de uno de los países más poderosos del mundo.