Apenas quedan dos días para que Tamara Falcó e Íñigo Onieva por fin puedan darse el “sí, quiero” después de haber pasado por un sinfín de adversidades. La pareja está inmersa en los preparativos del gran día, con todo el estrés y los nervios que conlleva. De hecho, han cancelado su última clase de baile antes de la boda por falta de tiempo.

En estas jornadas previas a lo que muchos ya han denominado como el enlace del año, la marquesa de Griñón se ha puesto nostálgica y ha querido compartir con su más de un millón de seguidores de Instagram una serie de fotografías inéditas de la fiesta de pedida de mano junto a su familia e Íñigo Onieva, que tuvo lugar el pasado sábado 22 de abril en la casa de Isabel Preysler de Puerta de Hierro.

Allí se reunieron las dos familias de los novios junto a otros invitados, y disfrutaron de una agradable velada de la que ahora se pueden ver algunos instantes, desde la llegada de Íñigo Onieva y Tamara Falcó, ataviada con un elegante diseño de Zimmermann, una firma australiana; hasta la preciosa mesa en la que pudieron degustar la cena.

Se trata de un álbum que muestra la cara más íntima y familiar de los novios, especialmente de Tamara Falcó, que se fotografió junto a su madre, Isabel Preysler, y su hermana Ana Boyer, sus dos grandes apoyos en las complicaciones a las que ha tenido que hacer frente en su camino hacia el altar.

Mientras, los preparativos siguen su curso en el palacio de El Rincón, donde tendrá lugar la celebración de la boda y hasta donde ya han llegado varios coches y furgonetas. El objetivo es convertir la finca en un escenario idílico para que Tamara Falcó e Íñigo puedan, a pesar de todo, disfrutar de las nupcias de sus sueños.