Silvia Bronchalo, la madre de Daniel Sancho, llegaba este jueves 17 de agosto a Tailandia para encontrarse con él en la prisión de Koh Samui, un encuentro de más de una hora que se produjo entre cristales y por teléfono.

Las autoridades tailandesas le permiten visitar a su hijo una vez al día, de lunes a viernes, y hoy no ha faltado a su cita. Aunque el primer día evitó pronunciarse ante los medios que la esperaban a la salida de la cárcel, ahora Bronchalo se ha decidido a dar un paso al frente y romper su silencio, en primer lugar, para agradecer el respeto que la prensa ha mostrado por ella y su familia.

“No soy mediática, no tengo ningún interés en salir en televisión ni nada. Creo que lo sabéis, y agradezco y respeto muchísimo la empatía que estáis mostrando”, ha comentado ante los reporteros.

Además, Bronchalo ha explicado cómo se encuentra su hijo Daniel, y de sus palabras se entiende que el chef va levantando cabeza tras su detención: “Para mí ha sido muy difícil. Comunicaros que está bastante mejor, que está tranquilo, le están tratando muy bien y a esperar que se resuelva todo”.

A pesar de la dura situación y de que las autoridades tailandesas exigen para su hijo, acusado de asesinar con premeditación a Edwin Arrieta, la pena de muerte, Bronchalo se muestra optimista y confía en que todo mejore: “Lleva diez días y está bastante mejor, dentro de lo que cabe. Ya se resolverá la situación”.

Sobre su primera visita, ha confirmado que tanto ella como su hijo se emocionaron mucho al verse por primera vez tras el estallido del escándalo. “Sí, claro, y yo”, ha contestado cuando los periodistas le han preguntado.

Por último, la madre de Daniel Sancho ha dejado claro el mal momento que está pasando ella y el resto de la familia, destacando que “nadie se espera una cosa así, nadie está preparado para recibir una cosa así. Nadie nos prepara para una noticia así”.