Tamara Falcó ha recibido hoy una de las peores noticias que podía escuchar. La firma 'Sophie et Voilà', con la que había contratado el diseño de su vestido de novia, ha decidido no seguir adelante con la confección de su traje nupcial por "las exigencias" de la hija de Isabel preysler, que no irían en consonancia con el código ético de la marca. "Sentimos un profundo respeto por la creación artística de otros compañeros y nuestra ética empresarial nos impide traspasar ciertos límites que pondrían en peligro la autoría original del diseño", comenzaba diciendo el comunicado oficial. "Por eso, y por el respeto que nos merece la originalidad de los trabajos de otras marcas de alta costura, no podemos cumplir con determinadas exigencias de la señora Falcó, que desde el inicio de la relación hemos desaconsejado y negado a realizar por acercarse demasiado a diseños ajenos a nuestra firma", zanjaba, terminando así con su relación con la socialité.

Esta noticia ha caído como un jarro de agua fría a Tamara Falcó. La hija de Isabel Preysler, a través de la revista 'Hola', ha confirmado que se ha enterado de esta decisión a través de la prensa, algo que le ha dejado en shock. "Me acabo de enterar por los medios... No tenía ni idea y nunca pensé que llegaríamos a este punto. De hecho, estábamos trabajando, al menos por nuestra parte, en un entendimiento", ha relatado al anterior medio citado. Además, ha querido desmentir que quisiera plagiar algún diseño. "Una cosa es la copia y otra el trabajo con inspiraciones, que es un proceso creativo común en todos los diseñadores que a mí misma me enseñaron incluso en la escuela de Marangoni, donde estudié. Aprendes que un proceso creativo bebe de muchas fuentes de inspiración y lo que yo les trasladé fueron mis inspiraciones sin intención de que copiaran un diseño", ha expresado sobre el asunto a 'Hola'.

La hija de Isabel Preysler, a menos de dos meses, se ha quedado sin vestido de novia, convirtiéndose en uno de los mayores retos a los que se tiene que enfrentar de aquí a su enlace matrimonial. "Pues sí... es un problema Tengo que empezar todo desde cero. Me da mucha pena porque lo que tenía que ser un momento super especial e ilusionante de elegir el vestido y probármelo se había convertido en un conflicto lleno de momentos de tensión. Se había desvirtuado totalmente el proceso...pero, aún así, no pensé que fuéramos a llegar hasta aquí. Así que le doy las gracias a 'Sophie et Voilà' por todos los buenos deseos que me traslada en su comunicado, pero me han dejado lo que se dice compuesta y sin vestido", aseguraba al anterior medio citado.

Uno de los primeros en pronunciarse tras el bombazo ha sido Juan Avellaneda, diseñador e íntimo amigo de la marquesa de Griñón, que ha estado presente en todo el proceso creativo del vestido de la socialité hasta ahora. El modisto, al igual que la Tamara Falcó, se ha enterado por los medios de la inesperada noticia y se encuentra aún un poco desorientado con lo sucedido. Avellaneda ha salido en defensa de la hija de Isabel Preysler y ha confirmado a 'Europa Press' que nunca ha intentado plagiar ningún diseño, asegurando que "esto es imposible". Tras esto, el diseñador ha sido preguntado si, con este revés, la socialité se ha planteado posponer su boda, algo que el modisto no cree que ocurra. "Eso ya no… Eso ya lo dudo. Visto lo visto yo ya me espero, o sea, no sé qué pensar", ha expresado sobre el futuro del enlace matrimonial de Tamara Falcó e Íñigo Onieva.