Hoy es un día muy especial para David Flores. Cumple 23 años sin poder cumplir su mayor deseo: que acaben los enfrentamientos judiciales entre sus padres, Rocío Carrasco y Antonio David, algo impensable en estos momentos familiares tan críticos.

El joven David estará arropado por casi todos los suyos, pero, seguro, seguirá echando de manos a su madre, que, posiblemente, no le felicite por su cumpleaños, al igual que sucedió en años pasados.

Rociito está más pendiente de lucrarse enseñando en “Sálvame” las pertenencias de su madre, tal y como ocurrió este martes, que de preocuparse por lo que les ocurre a sus dos hijos, Ro y Da.

Tampoco valora la petición de su hermana, Gloria Camila, de sentarse en la misma mesa para discutir, e intentar arreglar, los desafueros entre ambas. Dicen que la Carrasco tiene bloqueada a su hermana en su teléfono, que no quiere hablar con ella.

En este sentido, ha mandado al destierro a Gloria, Ortega Cano, Amador Mohedano, Rosa Benito, y, en cierto modo, a sus propios hijos.

Aunque la recordada Rocío Jurado ya expresó en vida que el legado que contienen los dieciocho contenedores debía permanecer en la imrimidad Familiar o donado en parte al museo que llevará su nombre en su tierra natal, Chipiona, su hija se ha saltado a la torera aquel deseo extremo de su progenitora, lo que para su familia es una completa traicion. Por eso no aparecieron este martes en el paripe montado por “Sálvame” abriendo uno de los container. Rociito estuvo sola ante la ausencia de Los mohedano y los Ortega. Ni el tito Amador aceptó la propuesta económica del programa para unirse al homenaje.