Lujo
Mosh: así es el exclusivo grupo de restauración que atrae a Nico Williams, Lamine Yamal y Haaland y que ha vendido la botella de champagne más cara de Marbella
El night club y restaurante Momento, uno de sus seis locales en la Costa del Sol, vende un Dom Perignon por 50.000 euros, mientras las dos estrellas de la selección celebran su triunfo en la Eurocopa en Mosh Fun Kitchen
Marbella y lujo son desde hace más de medio siglo dos conceptos que van unidos de la mano irremediablemente. La ciudad, escogida por el portal "European Best Destinations" como mejor destino europeo en 2024 gracias a los votos de un millón de viajeros, sigue acumulando hitos históricos que dan buena muestra de cómo este pequeño municipio de la Costa del Sol (apenas 165.000 habitantes, pero que se disparan hasta unos 400.000 en verano, es un claro exponente de la atracción y concentración del lujo y la exclusividad a nivel mundial. Uno de los principales responsables de ese posicionamiento, a través de una oferta diferencial de restauración y ocio en la región de lo más cualitativa, es Grupo Mosh, la compañía marbellí fundada en 2016 que ya cuenta en su haber con un total de cinco restaurantes propios y un sexto en colaboración junto a otra empresa exponente internacional de la región, Grupo Dani García, y la firma de moda universal Dolce&Gabbana.
Tal es el nivel de exclusividad del grupo, que recientemente ha logrado la venta de una botella de champagne más cara de la historia de Marbella, lo cual son palabras mayores. Se trata de un referencia magnum de seis litros (Matusalén, en la jerga vinícola) de Dom Pérignon Champagne Brut Luminous Phantom. La venta se llevó a cabo recientemente en Momento, el restaurante y night club que el Grupo Mosh tiene en pleno corazón de la Milla de Oro de Marbella. La botella era, hasta el momento, una de las joyas más valoradas en la cava del local al tratarse de una edición limitada con muy pocas unidades producidas por la bodega francesa en el mundo. El precio fue pagado por un cliente VIP particular que asistió con más amigos a disfrutar del ambiente y propuesta musical del night club, apodado como el Templo de la Música Electrónica al acoger dentro de su propuesta actuaciones musicales, únicas en península y Marbella, de algunos de los mejores DJ’s mundiales como Black Coffee, Andrea Oliva, Marco Carola o Luciano, entre muchos otros.
Con un impactante diseño, cuenta con discoteca, terraza y restaurante a cielo abierto. En el restaurante, con cocina abierta hasta las 5 de la madrugada, se puede disfrutar de una deliciosa cocina Nikkei, firma del chef ejecutivo de Grupo Mosh, Franco Francechini. Recetas con una inspiración mística que, en palabras de su autor “buscan tener un efecto energético capaz de alimentar el cuerpo y el alma”. Una filosofía diferencial que cimenta su oferta de platos, desde sus ingredientes hasta su presentación. Destacan el tiradito de pez mantequilla, los mini tacos de wagyu, la ostra fina de Claire, el risotto yayo trufado, además de su carta de sushi y originales propuestas de postres como el mochi de cereza. Pero a partir de la medianoche, Momento se transforma y el ambiente de discoteca inunda todo el local hasta altas horas de la madrugada.
Pero esta es sólo una de las caras del Grupo Mosh. Otra fue la que pudieron disfrutar hace escasos días dos de las estrellas de la Selección Española de fútbol tras la conquista de la Eurocopa en Alemania: Nico Williams y Lamine Yamal. Los dos jovenes astros del balón se reencontraron en Marbella en Mosh Fun Kitchen, el primero de los establecimientos del grupo en este municipio y considerado (y aclamado) por muchos como el primer restaurante "dinner-show" de Marbella, donde ambos jugadores arrancaron sus vacaciones juntos junto a otros familiares y amigos.
En cualquier caso, la de Lamine Yamal y Nico Williams no es la primera visita de ilustres del universo del fútbol a Mosh Fun Kitchen. El restaurante también tiene la suerte de contar entre sus clientes más VIP con el delantero y estrella del Manchester City, Erling Haaland. El deportista noruego es un enamorado desde su
infancia de Marbella, destino al que aprovecha a viajar cada vez que su agenda profesional se lo permite y donde es un habitual en los diversos establecimientos de Grupo Mosh como su "beach club" Playa Padre, donde la magia de Tulum se traslada hasta Marbella, el citado "night club" Momento o en su club solo para socios Motel Particulier, gracias a la buena relación personal que mantiene con los socios y propietarios del grupo de restauración y ocio. Otro de los futbolistas asiduo a los establecimientos de Mosh en la Costa del Sol es Joaquín, centrocampista retirado y una de las caras más mediáticas de nuestro país.
El origen de este imán de exclusividad y lujo, que cuenta ya con más de 600 empleados y una facturación millonaria, se remonta a 2016. Entonces, un grupo de emprendedores -Dom Pastoressa, Albert Beniflah, Carmen Navarrete y Roberto Santamaría- con amplia experiencia en el sector del ocio, tanto a nivel nacional como internacional, deciden abrir su primer restaurante en Marbella, Mosh Fun Kitchen. Tras el éxito de este primer local, le siguieron Playa Padre en 2017, Momento en 2018, Motel Particulier en 2020, Nido Estepona en 2021 -su primer "beach club" fuera de Marbella- y por último, La Cabane, en el verano de 2023. Este último es el primer proyecto del grupo junto a Dani García y Dolce & Gabbana para resucitar el mítico "beach club" del Hotel Los Monteros, abierto en 1965, epicentro de las fiestas marbellíes en los 70 y 80, y cerrado durante 14 años hasta que Mosh le insufló nueva vida.
Amantes de la música, la moda, la decoración y la gastronomía, los proyectos de este grupo de empresarios florecen y nacen inspirados en sus viajes alrededor del mundo que los llevan a recopilar experiencias que, posteriormente, importarán a su particular universo empresarial. Un universo de lujo y exclusividad en constante evolución y crecimiento que triunfa en Marbella y alrededores y que es sinónimo de localizaciones extraordinarias, arquitectura e interiorismo evocadores y una propuesta gastronómica inspiradas en las raíces conceptuales (y diferenciales) de cada uno de sus locales donde la moda, la música y el hedonismo son mucho más que una seña de identidad, una forma de disfrutar de la vida.