Moción de censura

PP y BNG se alían para echar al PSOE de una alcaldía de A Coruña

El líder de los socialistas gallegos califica como “aberración” y “giro antidemocrático” la moción de censura planteada en Muxía

Ayuntamiento de Muxía.
Ayuntamiento de Muxía. Concello

La política hace, a veces, extraños compañeros de viaje. Este sería el caso de lo que está sucediendo en estas fechas en Muxía, un pequeño municipio de Galicia situado en la comarca de Fisterre, en la Costa da Morte, y en donde, hasta la fecha, gobernaba el PSOE.

Lo hacía gracias al resultado de las elecciones municipales de 2023, en donde obtuvo 5 ediles por los 3 del PP, los 2 de Independientes por Muxía (IxM), y el concejal del Bloque Nacionalista Gallego.

Ahora, la oposición, encabezada por los populares, ha presentado una moción de censura contra el alcalde socialista, Iago Toba, proponiendo como candidato a la Alcaldía al portavoz de Independientes por Muxía, Francisco Javier Sar.

Hasta aquí todo podría resultar parte del juego democrático. Una partida que, no obstante, se complica todavía más al contar esta moción con el apoyo imprescindible del BNG, lo que decantaría la balanza para su triunfo.

En este sentido, la censura está firmada por PP, Independientes por Muxía y los nacionalistas gallegos. A partir de aquí, el pleno para votar la moción e investir al nuevo alcalde se celebrará el próximo 7 de octubre a las 12.00 horas.

Para tratar de esclarecer el complejo pacto, la portavoz del Partido Popular, Sandra Vilela, subraya que el acuerdo no ha sido “improvisado” ni consecuencia de “una pataleta”, sino que es fruto del diálogo y la negociación, en la que destaca que el PP renuncia a la Alcaldía pese a ser el grupo mayoritario de la oposición, aceptando que ésta pase a IxM.

“Tres partidos muy diferentes hemos dejado de lado lo que nos separa, para unirnos por el bien de Muxía”, subraya Vilela en una línea similar a la del que podría ser el nuevo alcalde en caso de prosperar la moción.

Francisco Javier Sar destaca que el gobierno del socialista Iago Toba -que lleva gobernando en Muxía cinco años-, se ha caracterizado por la “falta de comunicación” y las “malas formas”.

Por su parte, desde el BNG, su portavoz Mercé Barrientos recalca que lo que ocurre en Muxía es “una situación de excepcionalidad democrática”, con un alcalde que incurre continuamente en “insultos” y desprecios personales hacia la oposición, con comentarios vejatorios y machistas y con falta de gestión política.

Eso sí, la nacionalista deja claro que el BNG “nunca” dará una Alcaldía al PP dada la diferencia ideológica de ambas formaciones. Sobre esta base, el Bloque acepta el acuerdo para la censura al proponer este a Sar, de IxM, como regidor.

“Aberración”

Las reacciones políticas a esta moción no se han hecho esperar. Así, el secretario xeral del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, ha calificado de “aberración” el acuerdo, mostrándose sorprendido por el apoyo de los nacionalistas a este “giro antidemocrático”.

Besteiro ha justificado el calificativo de “aberración” en el hecho de que “el menos votado va a ser el que ostente la Alcaldía”.

Pese a que esto no así - el menos votado fue el BNG, con un 11% de sufragios frente al 21,5% de IxM, el 23,5% del PP y el 43,1% del PSOE-, Besteiro ha incidido en que el Bloque entra en un “giro antidemocrático” y “un poco antisocial” de que “quien tiene menos votos sea quien ostente la Alcaldía”.

Por su parte, la líder del BNG, Ana Pontón, no ha querido entrar a valorar una iniciativa que, ha dicho, será la propia Ejecutiva del partido quien estudie, por lo que se ha remitido a las “valoraciones” que este órgano adoptará esta misma tarde.