España
Rebelión contra la financiación «al antojo de los independentistas»
Protestas por el «uso partidista». El PP y sus presidentes autonómicos cargan contra Sánchez por beneficiar a Cataluña para lograr «los votos que no han querido darle en las urnas» y «mantenerse en La Moncloa»
El modelo de financiación autonómica del régimen común (el que afecta a todas las comunidades menos a Euskadi y Navarra) está caducado desde 2014. Se tendría que renovar cada cinco años, pero no se hizo ya que España estaba saliendo de la crisis de 2008 durante el Gobierno de Mariano Rajoy. Tampoco se abordó la reforma cuando Pedro Sánchez tomó el poder en 2018 con una moción de censura, y se fue aplazando mientras se encadenaban elecciones autonómicas que lo hicieron imposible.
Sin embargo, ahora, ante el bloqueo institucional tras las elecciones generales del 23J, en las que ningún partido cuenta con la mayoría suficiente para gobernar, el Gobierno en funciones busca fórmulas para ganarse los apoyos de los independentistas y así poder revalidar en cargo en La Moncloa. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha admitido que la financiación autonómica puede ser una «variable clave» en las conversaciones entre el PSOE y los partidos a los que quiere pedir su apoyo, en especial Junts y ERC. La condonación de la deuda de Cataluña es algo de lo que ya se ha hablado en el pasado y sus implicaciones van más allá de un voto de Junts o de ERC para lograr sus exigencias de referéndum o amnistía: ese perdón de la deuda catalana implicaría regalar a los separatistas dos años y medio de pago del IRPF de los contribuyentes de la Comunidad de Madrid.
Ante esto, el vicesecretario de Organización del PP, Miguel Tellado, señaló ayer que desde su formación consideran que se debe modificar el sistema de financiación autonómica, pero de forma «multilateral» y no «al antojo de los independentistas».
Durante una entrevista en Onda Cero, en el programa «Más de uno», Tellado reconoció que existe un problema de financiación de las comunidades autónomas en España y, por tanto, «se debe modificar». Eso sí, «no de forma bilateral con un partido», ERC, «que quiere condicionar la investidura de Sánchez», criticó. Y es que, apuntó, «plantear una quita en la deuda de Cataluña para ver si así consigue el señor Sánchez los votos que no han querido darle en las urnas, me parece un insulto a la inteligencia y la utilización de los recursos públicos, que son de todos, en beneficio personal de un candidato que sigue sin aceptar que ha perdido las elecciones», afeó.
Estas declaraciones llegan después del planteamiento de Esquerra, que pide que el Gobierno central asuma parte de la deuda del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) de Cataluña a cambio de un posible apoyo a la investidura de Sánchez, lo que ha provocado el recelo de varias comunidades, que han reclamado que no haya agravios en la reforma del sistema.
Tellado explicó que desde el PP consideran que esa modificación tiene que hacerse de forma «multilateral» y con todas las comunidades presentes, porque a su juicio «el sistema de financiación autonómica no está aquí para beneficiar a algunos territorios, sino para financiar servicios públicos» de todos. Asimismo, recordó que la financiación está para «financiar servicios públicos para ciudadanos que deben ser iguales ante las administraciones y no para financiar territorios».
Y es que si se privilegia a una región concreta, se estaría haciendo un llamamiento a la «irresponsabilidad en la gestión económica de las comunidades» y esto es un «error que ningún Gobierno debe cometer», destacó.
Por ello, el vicesecretario de Organización del PP calificó la oferta del Gobierno a Junts y ERC de «tremendamente grave» y afirmó que lo que estamos viendo es «esperpéntico». «El PSOE vuelve a las andadas, dispuesto a gobernar a cualquier precio y a atender cualquier propuesta», apuntó.
Si el pasado martes ya se quejó del agravio comparativo el presidente de la Comunidad Valencia, Carlos Mazón –quien advirtió de que no tolerará «que la financiación dependa de intereses de investidura o separatistas»–, ayer fue el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, quien criticó que pueda haber una condonación de deuda «unilateral» a algunas comunidades «sin compensar a Galicia, como mínimo, en el mismo porcentaje», con «el único interés egoísta» por parte del PSOE de «lograr un pacto de investidura». «No sería aceptable en absoluto y nosotros, desde luego, reaccionaríamos», avisa.
A preguntas de los medios, Rueda advirtió de que «nada de negociaciones bilaterales», una posibilidad que considera que «es muy preocupante», y subrayó que «el lugar para hablar de todo esto es donde están todas las comunidades autónomas con el Gobierno central, que es el Consejo de Política Fiscal y Financiera».
En este sentido, recordó que el PSOE «tuvo cinco años de gobierno» para reunir al Consejo de Política Fiscal y Financiera y abordar la financiación autonómica, «que es lo que están pidiendo todas las comunidades autónomas, incluidas las del Partido Socialista». «Nunca quiso hacerlo, por algo sería, y ahora estamos viendo por qué, porque viene mucho mejor hacer negociaciones bilaterales, excluyéndonos a todos los demás», lamentó.
A este respecto, Rueda apuntó que «hay que distribuir entre todas las comunidades» los recursos públicos para atender a los servicios básicos. «No se puede utilizar con el único interés de ser investido o de lograr unos apoyos puntuales, eso es una muestra de insolidaridad absoluta», afirmó.
✕
Accede a tu cuenta para comentar