Elecciones Argentina
Sergio Massa: el triunfo del ministro de Economía que llevó la inflación en Argentina al 140%
Hay 10 millones de argentinos que prefieren mantenerse en el mismo camino, aunque les condene a la miseria
Que el peronismo decidiera presentar a su ministro de Economía, Sergio Massa, como candidato a la presencia de la república era una locura. Que ese candidato haya ganado en primera vuelta las elecciones presidenciales de Argentina supone una locura todavía mayor. Pero así ha sido: el peronismo de Sergio Massa ha logrado casi el 37% de los sufragios y el libertario Javier Milei se ha quedado en el 30%. Han quedado fuera de la segunda vuelta la conservadora Patricia Bullrich (con casi el 24% de los votos), el peronista Juan Schiaretti (6,5% de los votos) y la socialista Myriam Bregman (2,5% de los votos).
Todo se decidirá en la segunda en la segunda vuelta, pero lo que en principio parecía una victoria clara para Milei, ahora se ha convertido en una empinada cuesta arriba. Milei necesitaría atraer a casi todos los votantes de Bullrich para terminar ganando, pero puede que muchos de estos votantes se vayan a la abstención. Es decir, ahora mismo no resulta en absoluto descartable que Sergio Massa alcance la presidencia, lo cual sería entre cómico y trágico. Cómico porque sería descabellado que llegara a ser presidente el ministro responsable de haber disparado la tasa de inflación hasta el 140%, de haber hundido la cotización del peso a más de 1.000 pesos por dólar (antes de que el peronismo regresara al poder, estaba a 60 pesos por dólar), de haber colapsado los ingresos reales de los argentinos y de haber multiplicado la tasa de pobreza hasta superar el 40%. Trágico porque Massa, y el peronismo en general, perseverarían en todas esas políticas calamitosas políticas y terminarían por arrasar con la economía. Sin embargo, parece que hay 10 millones de argentinos que no quieren cambiar de rumbo: que prefieren mantenerse en el mismo camino aunque ese sea un camino que los condene a la miseria. Las redes clientelares que ha extendido el peronismo durante décadas han funcionado una vez más. Verdaderamente desolador y deprimente.