Comercio

España se juega 500 millones de euros anuales en el sector porcino por las represalias chinas

La patronal catalana Foment del Treball pide evitar una guerra comercial

Josep Sánchez Llibre se reúne con la Dirección General de Comercio de la Comisión Europea
Josep Sánchez Llibre se reúne con la Dirección General de Comercio de la Comisión Europea Foment del Treball

El sector porcino español podría perder 500 millones de euros anuales, en caso de que China suba sus tarifas arancelarias como respuesta a la decisión de la Comisión Europea de imponer represalias comerciales en sus exportaciones de coches eléctricos.

Estos son los cálculos de la patronal catalana, Foment del Treball, cuyo presidente, Josep Sánchez Llibre, ha acudido a Bruselas para alertar a las autoridades comunitarias de esta situación y pedir que las tensiones comerciales entre Bruselas y Pekín no vayan más allá. Actualmente España es el socio europeo que exporta más cerdo a China (el 80% se concentra en Cataluña y Aragón) y el sector cárnico sustenta aproximadamente 115.000 empleos en España.

En 2023, China fue el cuarto socio comercial de España y el segundo proveedor de bienes. Aparte del sector cárnico, las empresas españolas que cuentan con más presencia en el gigante asiático son las relacionadas con la energía, los servicios financieros, la consultoría, el textil, la automoción, la electrónica, el turismo, los servicios legales o las telecomunicaciones. “Tenemos que activar todos los mecanismos necesarios para que esta situación no se extienda a más sectores económicos”, ha asegurado el presidente de la patronal catalana.

La semana pasada tuvo lugar una reunión entre el vicepresidente económico de la Comisión Europea, Valdis Dombrovkis y su homólogo chino, Wang Wentao con el objetivo de llegar a una solución negociada para que los aranceles que ha impuesto la UE de manera provisional a las importaciones chinas de vehículos eléctricos no se conviertan en permanentes. El encuentro terminó sin avances. Para que las tarifas arancelarias contra China se prolonguen durante los próximos cinco años debe tener lugar una nueva votación de los Estados Europeos.

Se necesitan quince países europeos en contra de esta medida para frenar la continuidad de estas represalias comerciales. Alemania es uno de los Estados que se ha mostrado en contra de este paso, ya que el gigante asiático representa alrededor del 30% de las ventas por parte de los fabricantes alemanes y las represalias por parte de China pueden dañar fuertemente a su industria automovilística. Aunque en un principio España se mostró a favor de estas tarifas, las palabras del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en las que pidió evitar una guerra comercial con China, fueron interpretadas como un cambio de posición por parte de España.