El tope al precio del gas no baja la factura el 20% prometido por Sánchez tres meses después

El gas subió un 25,8% en julio respecto al mismo mes del año pasado y encadena ya 15 meses al alza después de 22 meses de descensos que hubo anteriormente. En términos mensuales, en julio el precio del gas subió un 5,3%, su vigésima primera subida seguida tras cuatro meses a la baja, según los datos publicados por el INE el pasado viernes. Y esto pese al tope al gas que entró en vigor hace tres meses, que ha rebajado apenas un 14,8% el precio mayorista de la electricidad sobre la tarifa regulada o PVPC.

El precio medio del megavatio hora (MWh) durante estos 90 días ha sido de 254,7 euros, unos 43,5 euros menos que los 298,87 euros a los que se habría pagado de no contar con el mecanismo, aunque estaría por debajo de la rebaja calculada por el Gobierno, que preveía que se redujera hasta un 20% el precio de la luz para más de diez millones de usuarios en España.

Aún así, los precios son más bajos que en Europa. El MWh en España ha sido un 39% más barato que en Italia, y un 18% menor que en Alemania, donde ha llegado a una media de 309,41 euros. La inestabilidad también ha dejado su huella en Francia, donde la media de estos dos meses ha sido de 372,29 euros, un 31,5% por encima de la española.

En más de una ocasión, los precios europeos han sufrido picos intradía cercanos a los 650 euros/MWh, especialmente en Italia, donde la electricidad ha marcado de media 418,79 euros/MWh, coincidiendo con los dos primeros meses de la «excepción ibérica».

De estas alteraciones descontroladas de los precios, además de la guerra en Ucrania, tiene la culpa el incremento de la demanda eléctrica este verano, con récord de calor. Un ejemplo: el 14 de julio, durante la segunda ola sahariana, la demanda marcó récord anual en España tras alcanzar los 38.284 MW a las 14:19 horas, por encima de los 38.248 MW del día anterior, según datos de Red Eléctrica de España (REE).

Las compañías eléctricas tuvieron que usar más ciclos combinados –más caros al usar gas para generar energía– para satisfacer la alta demanda durante estos días de calor más intenso, en los que las renovables, por sus limitaciones climatológicas, aportan menos al «mix». Así, el 16 de julio, el ajuste a abonar por los beneficiarios del tope al gas para compensar a estas centrales marcó máximos, 169,11 euros/MWh, superando el precio fijado en la subasta para la electricidad en sí, según datos recogidos por Efe. Según el operador gasista Enagás, en lo que va de año la demanda de gas para producir electricidad se ha disparado un 83,2%, hasta los 72.984 GWh.