Inversiones

Las claves de la semana para invertir en Bolsa

El BCE confirmó el final de la compra de bonos para este mismo mes de junio y anunció una subida de 25 puntos básicos para la reunión de julio

Un panel del Ibex 35 en el Palacio de la Bolsa en Madrid
Un panel del Ibex 35 en el Palacio de la Bolsa en MadridEduardo ParraEuropa Press

Los mercados volvieron a tambalearse después de conocer el dato de inflación en EEUU, los inversores temen que los bancos centrales endurezcan su postura, en un momento en el que la economía da señales de debilidad. Las bolsas a nivel global tuvieron su peor desempeño semanal desde 2020, y ven como la inflación todavía este lejos de estabilizarse.

Las preocupaciones siguen centradas en averiguar hasta cuando la inflación va a permanecer tan alta, y cuanto tiempo va a soportar la economía las progresivas subidas de tipos. En China han vuelto a aumentar los contagios en Beijing y Shanghai, donde han empezado las pruebas masivas. Una vuelta a la estrategia de COVID-Zero generaría restricciones que producirían mayores retrasos en las cadenas de suministro.

El BCE confirmó el final de la compra de bonos para este mismo mes de junio y anunció una subida de 25 puntos básicos para la reunión de julio. El organismo europeo advirtió que, si la inflación persiste o sigue en aumento esta dispuesta a realizar aumentos mayores, dejando la puerta abierta a una subida de 50 pb en septiembre. También se espera que la tasa de depósito vuelva al 0% al final del tercer trimestre desde el -0,5% actual.

Lagarde reiteró la disposición del BCE para abordar cualquier posible pánico en el mercado de bonos a medida que aumentan los costos de endeudamiento, aunque no ofreció detalles sobre cómo reaccionaría exactamente los formuladores de políticas en tal escenario. La creciente incertidumbre sobre las perspectivas de inflación y crecimiento hace que no puedan dar más orientación

La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, dijo la inflación es “inaceptable”, pero espera que se mantenga alta ante los problemas en las cadenas de suministros y la guerra entre Rusia y Ucrania. La administración revisará su expectativa de inflación para este año que ahora se sitúa en el 4,7%, mientras que el Banco Mundial recortó el pronóstico de crecimiento para la economía global del 4,1% al 2,9%.

El IPC de EEUU correspondiente al mes de mayo fue del 8,6%, un nuevo máximo en 40 años. Los inversores ya descuentan subidas de 50 pb para las próximas reuniones de junio, julio y septiembre. El bono a 5 años está ofreciendo una rentabilidad mayor que el de 30 años, lo que muestra los temores a una recesión.

Los precios del petróleo superaron los 120 dólares y se acercan a los máximos del pasado mes de marzo ante el aumento de la demanda de China y la menor oferta de Rusia. Las refinerías no están siendo capaces de incrementar la oferta para compensar la caída en la producción y los precios del crudo ya suben más de un 50% en el acumulado del año.

Los inversores vuelven a utilizar el dólar como valor refugio, y a pesar de la reunión del BCE, el EURUSD se acerca a mínimos anuales. Bitcoin volvió a sufrir otro fin de semana de ventas y llegó a perder los 27.000 dólares, cerca de los mínimos del pasado 2020.

Eventos destacados

  • El evento más importante de la semana será el miércoles con la reunión de la Reserva Federal, donde se espera otra subida de 50 puntos básicos. El jueves es turno para el Banco de Inglaterra donde se espera otro aumento de 50 pb, lo que sería la quinta subida consecutiva. Sería el mayor incremento desde 1997 y un mensaje claro sobre su postura ante la inflación.
  • Respecto a las publicaciones macroeconómicas destacan las ventas minoristas y permisos de construcción en EEUU, el índice ZEW de confianza inversora en Alemania y la producción industrial en China.
  • La temporada de resultados empresariales correspondientes al primer trimestre esta llegando a su fin y esta semana destacan las de Oracle el lunes y Adobe el jueves.

El evento de la semana: Reunión de la Reserva Federal

El mercado descuenta un incremento de 50 puntos básicos en la reunión de esta semana y otros 50 puntos en la reunión de julio. A las subidas de tipos hay que sumar el inicio de la reducción de balance a un ritmo de 47.500 millones que irá aumentada a 95.000 millones hasta septiembre. La Reserva Federal espera poder equilibrar los precios sin provocar un aumento del desempleo, que se encuentra en el 3,6%, mínimos de los últimos 50 años.

Varios miembros de la Fed han mostrado su disposición a realizar las subidas de 50 pb que sean necesarias para devolver a la inflación a su objetivo. Lo que no concretan es qué pasaría si antes la economía norteamericana entra en recesión. Esta es la gran pregunta que se hacen los inversores y una de las principales causas de la volatilidad del mercado.

Los inversores confiaban en una pausa a partir del mes de septiembre en el caso de que la inflación se enfriará. La inflación parece haber tocado techo, pero todavía es pronto para estimar cuándo se acercará a su objetivo, por lo que no consideramos que pueda haber una pausa hasta que haya una evidencia clara y convincente de que la inflación está bajando.

La acción de la semana: Sacyr

La constructora española volverá a cotizar dentro del Ibex 35, tras abandonarlo en junio de 2016. A pesar de una situación económica desfavorable, ha logrado incrementar su beneficio un 25% en el último trimestre, así como mantener su dividendo. Como ya hicieran otros competidores como Ferrovial y ACS, ha ido rotando su negocio hacia el de las concesiones que ya representan el 80% de su cartera de proyectos.

Sin embargo, son negocios complementarios, ya que para dar servicio, primero hay que construir. Aunque la mayor parte son la construcción y puesta en servicio de autopistas, están creciendo a doble dígito las relacionadas con el tratamiento de agua. Su principal mercado, además de España, continúa siendo Latinoamérica, donde destacan Colombia, Chile, México y Uruguay.

La semana pasada también fue protagonista tras anunciar la venta de su participación en Repsol después de quince años en el accionariado. La compañía de infraestructuras ha aprovechado la subida del 50% en la petrolera española para deshacerse del 2,9% mantenía en cartera. La operación se cerró en 621 millones, de los que 563 han ido a reducir deudaque estaba asociada a las acciones