Boeing 747: adiós al mítico “jumbo” que democratizó los grandes viajes en avión

El fin de un mito de la aviación se acerca. Según ha informado Bloomberg, Boeing ya ha puesto fecha para detener la producción de su icónico modelo 747. Según la agencia, el último aparato de este modelo saldrá de la cadena de producción que la compañía tiene en Seattle dentro de dos años. En la actualidad, la compañía produce el 747 a un ritmo de 0,5 aparatos al mes y aunque no ha confirmado la información del cese de producción, tampoco la ha desmentido de forma tajante. En este momento, Boeing tiene 15 aviones 747 pendientes de producción, de los que 12 serán para la compañía de carga UPS. Otros dos serán para la Fuerza Aérea de EE UU, que los incorporará a la flota presidencial.

Y es que los tiempos de gloria de “la reina de los cielos”, como también se conoce al aparato, en el transporte de pasajeros quedan ya lejos. Boeing comenzó a producir el 747 en 1968 y, desde entonces, ha fabricado más de 1.500 unidades de manera ininterrumpida. El “jumbo”, propulsado por cuatro motores y con doble piso, fue el primer avión de doble pasillo y revolucionó la aviación porque, en la década de los 70 del siglo pasado, con su capacidad, que podía superar los 500 pasajeros; abrió la puerta a una paulatina rebaja de los precios de los billetes lo que, a la postre, permitió a millones de personas viajar por todo el mundo, a lo que contribuyó también su autonomía de 13.800 kilómetros. Su imponente tamaño, más de 71 metros de largo que duplicaban los de otros modelos de la época, obligó a los aeropuertos a adaptar sus pistas. Y en las terminales, la llegada de cientos de pasajeros en un mismo avión también forzó a agilizar los controles para no congestionar las dependencias.

Nuevos tiempos

Pero a pesar de su éxito y la atracción que despierta entre los viajeros, en los últimos años, las preferencias de las aerolíneas han virado. En términos de eficiencia, alcance y flexibilidad, el 747 ha sido superado por otros modelos más pequeños como el Dreamliner y el A350 de Airbus. Y la crisis del coronavirus ha dado la estocada al aparato como también se la ha asestado al otro coloso que vino a hacerle la competencia desde el otro lado del Atlántico y le relevó en 2007 como el avión comercial más grande del mundo, el Airbus A380. Ambos están siendo retirados paulatinamente del servicio por las aerolíneas que todavía los tienen en sus flotas.

En 2016, Boeing ya manejó la idea de paralizar el programa del 747 por la falta de pedidos. Sin embargo, su imponente tamaño se convirtió en la tabla de salvación del 747. La eclosión definitiva del comercio online le tornó en el codiciado objeto de deseo de compañías de transporte aéreo, que han visto en su gran capacidad de carga una ventaja. Pero ahora parece que ni siquiera otros gigantes como Amazon o Alibaba serán capaces de salvarle de una retirada definitiva.